El Govern balear espera tener listo su nuevo cuerpo de vigilancia marítima a mediados de julio para comenzar a controlar la costa y el litoral con la llegada de las primeras tres embarcaciones adquiridas, de las cuales una será destinada a Ibiza y Formentera.
En febrero pasado, la presidenta, Marga Prohens, había anunciado en el Parlament que el Govern actuará este verano «por primera vez en la costa con un servicio de vigilancia del mar y el litoral». Será, según dijo, con una flota de 22 embarcaciones «para garantizar el fondeo correcto y la seguridad de bañistas y navegantes».
De ese total, 12 serán pequeñas embarcaciones para la gestión dentro de los puertos, mientras que las otras 10 con dimensiones más grandes se destinarán a la costa y el litoral.
Según pudo saber La Voz de Ibiza, de estas últimas están previstas dos para las islas de Ibiza y Formentera, otras dos para Menorca y seis en Mallorca.
“Es un contrato que ya se firmó y que tiene unos plazos de entrega a medida que se van construyendo. Las tres primeras llegarán a mitad de julio y se destinarán una a cada isla”, ha explicado Antoni Mercant, director general de Puertos y Transporte Marítimo del Govern balear del que depende Ports IB.
El resto de las embarcaciones estarán operativas en los siguientes seis meses “porque el astillero está en plena vorágine constructiva, porque nos tiene que entregar 22”, explicó.
Cuáles serán sus funciones
Mercant ha explicado a La Voz de Ibiza que no se trata de una “Policía del Mar” sino que busca una “acción preventiva y educativa. No tanto de acción correctora”.
“Nos gustaría que fuera más un servicio no policial, sino que sea un servicio educativo”, sostuvo.
Justamente, para este control efectivo hay “dos instituciones importantes. Por un lado, el Servicio Marítimo de la Guardia Civil que tiene sus embarcaciones y ya les gustaría tener también más medios. Por el otro, el Servicio de Vigilancia Aduanera. Y luego tenemos nuestros inspectores de Transporte Marítimo”.
Esta nueva flota será distinta a la de la Conselleria de Agricultura y Medio Natural que vigila que no se fondeé sobre posidonia.
“Nosotros pensamos que deberíamos crear un cuerpo de embarcaciones para vigilar la costa y el litoral, no solamente las zonas marinas que tienen grados de protección, que esto los vigilan los agentes de Medioambiente; o los de pesca que vigilan las pesquerías. Nosotros también tendríamos unas embarcaciones para vigilar la costa y el litoral, por supuesto, poniéndolas a disposición de todas las administraciones”, ha detallado Mercant.
Cómo operará
Entre sus funciones principales serán vigilar los campos de boyas y el chárter náutico. “Si están haciendo la actividad de forma regulada y, si hay alguna embarcación que, evidentemente, no tenga su declaración responsable, pues iniciaremos expediente”, ha explicado a La Voz de Ibiza.
Las 10 embarcaciones serán propiedad de Ports IB, aunque su gestión y el patrón estarán a cargo de la empresa pública Tragsa“y se podrán subir funcionarios de cualquier administración, los ponemos a su disposición para intervenir en los casos que consideren necesarios”.
“Puede subir un agente de la Guardia Civil, un policía municipal, un técnico de transporte marítimo, un funcionario o un inspector de costas. Es decir, será un vehículo a disposición de las administraciones”, remarcó.
