Las aguas de Baleares han sido escenario de un incremento notable en la llegada de pateras este miércoles, alcanzando las 364 personas rescatadas en un solo día, según ha informado la Delegación del Gobierno.
La última embarcación, interceptada a las 11:50 de la mañana al sur de Formentera, transportaba a 19 personas de origen magrebí que se encontraban en buen estado de salud.
Llegada a Formentera y una jornada de rescates intensos
El rescate en Formentera es uno de los varios operativos de emergencia que se han llevado a cabo a lo largo de la jornada. Otras tres embarcaciones fueron interceptadas también en Cala Santanyí, en Mallorca, donde se auxiliaron a 61 inmigrantes de origen magrebí a la misma hora.
El ritmo de rescates se ha mantenido constante desde la madrugada, cuando a las 04:35 se localizaron a 17 personas al sureste de Mallorca, también en buenas condiciones de salud.
Este flujo de inmigrantes, que suma ya cerca de veinte embarcaciones en una sola jornada, responde a un patrón que las autoridades han seguido con atención debido a las condiciones marítimas favorables en el Mediterráneo, que podrían estar incentivando este tipo de desplazamientos.
Un operativo de rescate amplio y coordinado
Los operativos han requerido la intervención de Salvamento Marítimo y la Guardia Civil, que trabajan en colaboración para asegurar el rescate y traslado seguro de los inmigrantes a instalaciones de acogida.
La respuesta por parte de las autoridades ha sido rápida y coordinada en toda la región, con recursos de emergencia desplegados para garantizar la atención inmediata de los inmigrantes.
La Delegación del Gobierno en Baleares ha subrayado que la mayoría de los inmigrantes encontrados esta jornada son de origen magrebí, aunque también se ha identificado a grupos de origen subsahariano. Todos ellos fueron examinados por los servicios de emergencia, que confirmaron su aparente buen estado de salud antes de ser trasladados.
Este significativo aumento en el número de pateras y personas rescatadas refleja la creciente presión migratoria en las aguas de Baleares. Las autoridades locales y regionales mantienen un enfoque de cooperación y han implementado protocolos para gestionar esta situación, que implica no solo el rescate inmediato, sino también la provisión de ayuda humanitaria y recursos de acogida.
