La antigua gestora del hotel Punta Arabí, la empresa Llum Hotels, ha salido al paso de las acusaciones realizadas por Corrado, quien asegura que trabajó para esa firma sin contrato y que se le adeudan 12.000 euros. La compañía niega categóricamente deber cantidad alguna y atribuye cualquier reclamación pendiente a la actual propiedad del complejo.
Además, respecto a las acusaciones que exceden lo económico, el portavoz de la empresa expresó que, si bien no tienen nada que ver, «no puede creer las justificaciones que se inventan o en lo que se escudan para evitar cumplir con lo que se le está exigiendo; y respecto a las deudas no es con nosotros».
“Nosotros no adeudamos nada. Si alguien reclama algo, que lo justifique”, afirmó un portavoz de Llum en conversación con este medio. La empresa asegura que todos los pagos correspondientes a su etapa como gestora del complejo fueron realizados, incluidos nóminas, finiquitos y liquidaciones.
El caso de Corrado se enmarca en el proceso de desalojo del histórico complejo Punta Arabí, en Es Canar, donde durante los últimos años se alojaron personas en situación de vulnerabilidad, algunos por acuerdo verbal con anteriores gestores del recinto.
Entre ellos, Corrado, que asegura haber trabajado sin contrato para la empresa Llum y reclama una deuda impaga. La situación generó confusión mediática y cruce de versiones, especialmente tras publicaciones que lo vinculaban con una supuesta deuda atribuida a Paquita Marsan.
“El llamamiento no nos corresponde”
Según la versión de la compañía, una vez rescindido el acuerdo de gestión con la propiedad del hotel —actualmente en manos de Paquita Sánchez—, la responsabilidad de los nuevos llamamientos laborales recaía en la propiedad o en la firma que asumiera la nueva explotación, en este caso Fergus.
“Cuando se rescindió el acuerdo, se cerró todo. Si al año siguiente no se hace llamamiento a los antiguos trabajadores, eso es decisión de la propiedad”, explica el portavoz. “Nosotros no pintamos nada en ese hotel desde que dejamos la gestión. No hay ninguna deuda pendiente”.
«Está siendo un desalojo durísimo»: el viernes acabará la okupación de Punta Arabí en Ibiza
Reclamos cruzados
Llum señala que varios trabajadores han reclamado pagos a la empresa saliente, a la propiedad y al nuevo gestor, lo que, según el portavoz, genera confusión. “Hay un vacío legal en estos casos, pero lo cierto es que no tenemos ninguna obligación si ya no somos parte del proyecto y hemos cumplido con lo que nos correspondía”.
“A nosotros solo se nos podría reclamar si debiéramos nóminas o finiquitos, y no es el caso”, insiste.
“Quizás hay gente que no sabe a quién reclamar”
Desde Llum reconocen que puede haber trabajadores que, por desconocimiento o mala información, no tengan claro quién es el responsable legal de su situación laboral. En ese sentido, la empresa se pone a disposición para colaborar si es necesario: “Queremos lo mejor para la propiedad y para los trabajadores. Pero este tema, honestamente, ya no nos compete”.
