Los agentes de la Guardia Civil que realizaron la primera inspección ocular tras el incendio registrado el 3 de agosto de 2023 en ses Païsses (Ibiza), donde murió un anciano impedido, consideran que la acusada trató de provocar la explosión de un coche para avivar el fuego. Así lo han declarado este jueves durante la sesión del juicio con jurado que se celebra en la Audiencia Provincial de Palma.
Según han explicado, durante aquella primera inspección realizada para asegurar la zona y recabar indicios de criminalidad, les llamó la atención la presencia de varios cojines apoyados junto al depósito de gasolina de un vehículo situado en el garaje de la vivienda. Este hallazgo, “curioso y relevante”, se encontraba alejado del resto de focos del incendio y apuntaba, a su juicio, a un posible intento de hacer estallar el coche. Pese a ello, han señalado que las almohadas no llegaron a arder.
Una acusación de asesinato y prisión permanente revisable
El Tribunal del Jurado juzga desde el pasado lunes a una mujer acusada de prender fuego a la vivienda en la que dormían dos ancianos a los que cuidaba. La Fiscalía sostiene que la ahora procesada provocó el incendio de manera intencionada y reclama para ella la pena de prisión permanente revisable por un delito de asesinato y otro de incendio.
El Ministerio Público recuerda que una de las víctimas, un hombre de avanzada edad y totalmente dependiente, fue incapaz de abandonar la casa por sus propios medios y acabó falleciendo entre las llamas. La otra persona logró sobrevivir.
Más sesiones y declaración de peritos
Durante la vista de este jueves, los agentes han reiterado que los indicios encontrados en el garaje reforzaban la tesis de una actuación deliberada. El juicio continuará en los próximos días con la declaración de nuevos testigos y peritos antes de que el jurado popular quede encargado de emitir su veredicto.













