La Guardia Civil de Baleares ha desarticulado una organización criminal dedicada a cometer estafas bancarias mediante la técnica del spoofing, un método con el que suplantaban a entidades financieras para robar dinero de las cuentas de sus clientes.
La operación, denominada «Madean», ha culminado con la detención de siete personas en Barcelona y la incautación de dinero en efectivo, lingotes de oro, relojes de lujo, dispositivos electrónicos y un vehículo de alta gama.
Una estafa de más de un millón de euros
La investigación comenzó tras recibir numerosas denuncias de clientes de un banco en Mallorca, quienes detectaron movimientos irregulares en sus cuentas tras recibir mensajes y llamadas falsas que imitaban a su entidad bancaria.
La organización utilizaba la técnica del spoofing para falsificar el número de teléfono del banco y enviar SMS fraudulentos que dirigían a las víctimas a una réplica exacta de la banca online. Una vez que introducían sus credenciales, los delincuentes obtenían acceso a sus cuentas.
Para completar la estafa, los integrantes de la red llamaban haciéndose pasar por empleados de la entidad financiera y solicitaban los códigos de doble autenticación necesarios para realizar las transferencias fraudulentas.
Los investigadores estiman que la cantidad estafada supera el millón de euros, aunque no se descarta que el fraude alcance cifras aún mayores.
Redada en Barcelona y detenciones simultáneas
El 28 de enero, la Guardia Civil desplegó un operativo simultáneo en seis domicilios de la provincia de Barcelona, concretamente en Barcelona, Sant Boi, Tarrasa y La Granada.
Durante los registros, en los que participaron unidades de la Guardia Civil de Barcelona, el ARS y la Unidad Técnica de Policía Judicial, además de efectivos de la Policía Nacional, se procedió a la detención de siete personas, seis hombres y una mujer.
Además, se investiga a decenas de personas más por su posible vinculación con la red delictiva.
Lujo y grandes sumas de dinero
Los registros permitieron incautar dinero en efectivo, lingotes de oro, dispositivos de almacenamiento de criptomonedas, relojes de alta gama, joyas de oro y brillantes, prendas de ropa de gran valor y un arma simulada.
Los investigadores han destacado el elevado nivel de vida de los detenidos, que reflejaba la magnitud del fraude y la gran cantidad de dinero obtenida con las estafas.
Más detenciones en el horizonte
Las autoridades siguen analizando el material incautado y trabajan para identificar nuevas víctimas y posibles cómplices. No se descartan más detenciones en los próximos días.
Este caso ha vuelto a poner en el centro del debate la sofisticación de las estafas bancarias digitales y la necesidad de extremar la precaución ante mensajes y llamadas sospechosas que soliciten información bancaria.