Charlie Kirk, el prominente activista y comentarista conservador, fue asesinado el miércoles 10 de septiembre de 2025 durante un evento en la Universidad Utah Valley, en Orem, Estados Unidos.
Estaba participando en la primera parada de su gira American Comeback Tour, dirigiendo su característica mesa titulada “Prove Me Wrong”, cuando recibió un disparo en el cuello o la cabeza. La víctima fue trasladada de urgencia al hospital, pero falleció por las heridas recibidas.
Según los informes, el disparo salió desde un edificio cercano, a unos 200 yardas del escenario. El incidente generó pánico entre los presentes, quienes huyeron del lugar ante la balacera.
Así fue el momento del atentado contra Charlie Kirk
PRAY FOR CHARLIE KIRK NOW🙏🏽
Jesus, save his life and protect him! https://t.co/Bc7Zub8guH
— Sean Feucht (@seanfeucht) September 10, 2025
Quién fue Charlie Kirk, el flamante activista de Donald Trump
Charlie Kirk había nacido el 14 de octubre de 1993 en Illinois y se había convertido en una de las voces más influyentes del movimiento conservador estadounidense. En 2012, con apenas 18 años, fundó Turning Point USA, organización que creció rápidamente hasta transformarse en un poderoso aparato político juvenil con ramificaciones como Turning Point Action, Turning Point Faith y Turning Point Academy.
Además, fue conductor del programa The Charlie Kirk Show y en 2020 el presidente Donald Trump lo designó miembro de una comisión sobre educación patriótica. Su figura se consolidó como referente para los jóvenes republicanos y como un aliado clave del trumpismo, tanto en campaña como en la arena mediática.

En el plano personal, estaba casado con Erika Frantzve, podcaster y ex Miss Arizona USA, con quien tuvo dos hijos pequeños. Su imagen de líder conservador joven, con una fuerte presencia en medios y redes sociales, lo convirtió en una figura polémica y polarizante, pero también en un referente indiscutible dentro del espectro político de la derecha.
El asesinato de Kirk provocó una inmediata oleada de reacciones en todo el país. El presidente Trump, el vicepresidente J.D. Vance y diversos líderes republicanos condenaron el ataque, mientras que figuras demócratas como Hakeem Jeffries y Gavin Newsom también expresaron su repudio, subrayando la necesidad de detener la escalada de violencia política en Estados Unidos.

En el Congreso, la Cámara de Representantes interrumpió sus sesiones para rendir un minuto de silencio en su memoria, gesto que reflejó la magnitud del impacto de su muerte.
La investigación quedó en manos del FBI y la ATF. Aunque en un principio se informó sobre la detención de un sospechoso, las autoridades aclararon que no se trataba del responsable del disparo. Hasta el momento no se ha identificado al autor del ataque, lo que incrementa la tensión en un país marcado por la creciente normalización de la violencia política.