La operación Arco, llevada a cabo por la Policía Nacional en 2021, sigue su curso judicial con la petición de las penas por parte de la acusación particular.
Seis de los ocho detenidos enfrentan solicitudes de hasta seis años de prisión por su presunta participación en una organización dedicada al tráfico de personas y explotación sexual en pisos habilitados como prostíbulos en Vila, durante el período de restricciones por la pandemia del Covid19.
Según el escrito de acusación, los procesados enfrentan cargos por inducción a la prostitución y delito de trata de personas. Otros dos procesados también enfrentan penas de 2 años y medio de cárcel.
Tal como avanza el Periódico de Ibiza y Formentera, la investigación policial ha revelado que la red explotaba a las mujeres en pisos donde vivían hacinadas, en habitaciones con literas, captándolas en situaciones de especial vulnerabilidad. Los detenidos, de distintas nacionalidades, quedaron implicados en delitos que van desde pertenencia a organización criminal hasta blanqueo de capitales y contra la salud pública.
La operación Arco fue llevada a cabo por la Policía Nacional de Ibiza en 2021, y resultó en la detención de 10 personas por su presunta pertenencia a un entramado criminal internacional dedicado a la explotación sexual en la isla.