En el marco del plan urgente por el aumento de chabolas y riesgo de incendio lanzado esta semana por el Ayuntamiento de Vila, la Policía Local de Ibiza ha intervenido en una zona forestal de Can Palau de Baix, a la altura del kilómetro 2 de la E-20, tras detectar una fogata activa en un entorno de alto riesgo de incendio.
La actuación se enmarca en el nuevo plan municipal de urgencia impulsado por el Ayuntamiento para hacer frente a la proliferación de infraviviendas en áreas naturales y prevenir situaciones que pongan en peligro la seguridad y el medio ambiente.
Desde el consistorio ha detallado que «al llegar al punto de donde salía el humo, los agentes vieron a dos individuos, uno de ellos haciendo una hoguera para cocinar, al que se le pidió que apagara el fuego de inmediato. En ese punto, además, había varias chabolas hechas de materiales como tableros de madera, cartones y telas y una caravana en mal estado».
Según ha informado el cuerpo policial, los agentes ordenaron la extinción inmediata del fuego e identificaron a dos personas en el lugar. Una de ellas ha sido propuesta para sanción por encender fuego en un espacio natural, práctica prohibida por la normativa vigente. La otra portaba varias armas blancas, que fueron incautadas.

Durante la inspección, también se localizaron varias chabolas construidas con materiales altamente inflamables, lo que agrava notablemente el riesgo de incendio en una zona forestal ya muy expuesta a las altas temperaturas y la sequedad del terreno.
Esta intervención se suma a otras actuaciones recientes incluidas en la estrategia del Ayuntamiento de Ibiza, que contempla operativos conjuntos de la Policía Local, Bomberos y los servicios sociales para recuperar el control de espacios públicos, frenar la ocupación irregular de zonas forestales y ofrecer alternativas a las personas que viven en asentamientos ilegales.
Desde el Consistorio recuerdan que encender fuego en el monte está totalmente prohibido y supone un grave peligro para la isla, especialmente en estos meses de máximo riesgo.
Además, se intensificarán las inspecciones y controles para detectar actividades ilegales y garantizar la seguridad tanto de los vecinos como del entorno natural.