El actor y director Robert Redford, protagonista de títulos como El golpe, Memorias de África o Dos hombres y un destino, falleció la madrugada del martes en su rancho de Sundance (Utah) a los 89 años, según informó su publicista Cindi Berger.
«Robert Redford falleció el 16 de septiembre de 2025 en su casa de Sundance, el lugar que amaba, rodeado de los que amaba. Se le echará mucho de menos. La familia pide privacidad», señaló en un comunicado.

Ganador de tres premios Oscar, incluido el honorífico a toda su carrera en 2002, y fundador del Festival de Sundance, Redford fue uno de los actores más influyentes de su generación. En su filmografía figuran títulos emblemáticos como Dos hombres y un destino (1969), El candidato (1972), El golpe (1973), Todos los hombres del presidente (1976) o Memorias de África (1985). También triunfó como director con Gente corriente (1980), por la que obtuvo los Oscar a mejor película y mejor dirección.
El vínculo con Baleares
La noticia de su fallecimiento ha despertado en Mallorca un recuerdo muy especial. La isla fue escenario de varias etapas de su vida, mucho antes de convertirse en estrella mundial. En 1957, cuando todavía se ganaba la vida como pintor callejero, pasó dos meses en Mallorca buscando inspiración y tranquilidad: «Era 1957, así que todavía estaba la Guardia Civil (…) Fue una experiencia maravillosa. Estuve en Barcelona y luego pasé dos meses en Mallorca, donde pinté algunos cuadro», recordaría años después.
En los años sesenta, ya con los primeros papeles en Hollywood, Redford regresó a la isla con su familia y se instaló en Alcúdia, entonces un pequeño pueblo de pescadores. Allí buscó un entorno más sencillo para criar a sus hijos en contacto con otras culturas y reflexionar sobre su futuro como actor. «No estaba seguro de si quería seguir siendo actor. Había hecho tres películas en Hollywood y me tomé un año sabático», confesó en una ocasión.

Décadas después, en 2012, durante una visita a Madrid para presentar el Sundance Channel, volvió a evocar con nostalgia la isla, un lugar que siempre asoció a la pintura, la familia y la búsqueda personal, muy lejos del ruido de Hollywood.
Una vida de cine
Conocido como el “chico de oro de Hollywood” y símbolo de varias generaciones, Redford también dejó huella como activista ecologista y defensor del cine independiente. Su último trabajo en la gran pantalla fue en Vengadores: Endgame (2019), donde retomó su papel de Alexander Pierce en el universo Marvel.
Redford deja como legado su prolífica carrera, el impulso del Festival de Sundance y un recuerdo imborrable en Mallorca, la isla mediterránea que marcó sus primeros pasos artísticos.