El Ayuntamiento de Sant Josep ha informado esta mañana que la Policía Local denunció a un hombre que se dedicaba a alquilar de manera ilegal a turistas tres tiendas de campaña en el asentamiento de Can Raspalls con diferentes sanciones que suman en total 90.750 euros.
A través de una inspección realizada ayer por la mañana, y a raíz de las consultas realizadas a algunas de las personas que allí habitan, los agentes observaron cómo una pareja abandonaba la zona con maletas y, al interrogarlos, éstos explicaron que habían estado pernoctando allí después de haber gestionado una reserva a través de una conocida plataforma de alquiler turístico.

Una vez recogidas todas las pruebas, la Policía Local de Sant Josep inició una investigación que culminó por la tarde con la identificación y posterior comunicación de las denuncias al individuo.

Se trata de cuatro sanciones por ejercer una actividad sin licencia (30.000 euros), sin seguro obligatorio para llevar a cabo esta actividad (30.000 euros) y sin los registros preceptivos para ejercer la actividad (30.000 euros), así como por acampar en una zona prohibida (750 euros).
Inspección
Paralelamente, durante la inspección realizada en colaboración con la Guardia Civil, la Policía Local de Sant Josep contabilizó 154 infraviviendas, un 56% tiendas de campaña y el 43% restante barracas, con un total de 206 camas.
Esta última cifra es la que determina el número estimado de personas que habitan actualmente el solar de Can Raspalls, mayoritariamente provenientes del norte de África.

Tres de estas personas son menores y están siendo atendidas por los Servicios Sociales desde su llegada al asentamiento. Asimismo, ocho personas han declarado no tener actualmente empleo, según han detallado desde el Ayuntamiento.
Por otra parte, se ha registrado que “algunas de las infraviviendas se encuentran aparentemente abandonadas y que el entorno está cada vez más sucio y degradado”.
Concretamente, se han observado puntos donde se encienden fogatas y bombonas de butano, fogones, cocinas de gas y baterías eléctricas, todos ellos elementos peligrosos susceptibles de provocar incidentes graves en la zona.
Medidas
En la rueda de prensa del alcalde de Sant Josep de sa Talaia, Vicente Roig, y del jefe de la Policía Local de Sant Josep, José Antonio Granados, se han anunciado medidas “más contundentes para revertir esta situación”.

En este sentido, Granados, además de expresar la enorme sorpresa que vivió en primera persona al encontrarse la actividad de alquiler ilegal, ha explicado que “la degradación que hemos advertido en este espacio a lo largo de los últimos meses es más que evidente y ha llegado a un punto donde incluso nos es complicado trabajar sobre el terreno por las condiciones de insalubridad que hay”.
El Ayuntamiento de Sant Josep, a través de la Policía Local, denunciará a partir de ahora cualquier caso de acampada ilegal que se detecte en el municipio, independientemente de su ubicación.

Esta sanción afectará “tanto a los individuos que ejecuten la acción de acampar como, si la acampada se produce en un terreno privado, a los propietarios que la permitan y no lo denuncien”, han adelantado.
En tanto, el alcalde de Sant Josep ha declarado que “hemos mantenido una actitud empática durante un tiempo debido a las circunstancias, pero hemos llegado a un punto donde se han sobrepasado algunas líneas que no podemos permitir. Como administración es momento de ponernos serios y actuar, conforme a la justicia, ante cualquier actividad ilegal y que perjudique a los vecinos y cualquier lugar del municipio”.