Mientras que este miércoles está previsto que se realice el desalojo de Can Rova, el Ayuntamiento de Santa Eulària ha aclarado que el polideportivo de Puig d’en Valls “no se habilitará” para llevar a las personas que permanecen en infraviviendas del asentamiento ilegal ubicado en el barrio de Can Negre.
“Al menos no es una opción ahora mismo. Es una sala de las instalaciones municipales, pero seguramente se mirará otra opción”, han aclarado a La Voz de Ibiza, después de que durante el fin de semana trascendiera que se iban a acoger allí temporalmente a las personas afectadas por el desalojo.
Además, han detallado que “la metodología es la de siempre, usar la red insular y alojamientos privados (hostales, etc.). Se busca un lugar alternativo como medida de emergencia, pero no pensamos que sea necesario que vaya nadie”.
Los servicios sociales de Santa Eulària han identificado a las familias más vulnerables en el área, pero insisten en que una evaluación completa de sus necesidades solo será posible una vez se lleve a cabo el desalojo.
«Debemos entrar en el asentamiento para comprender mejor las condiciones de cada persona y actuar en consecuencia», explicó la conseller de Bienestar Social, Antonia Picó.
El Ayuntamiento ha coordinado un equipo de profesionales que estará listo para brindar asistencia. «Estamos preparados para responder a cualquier necesidad urgente que surja el día del desalojo», añadió Picó.
