La Agrupación de Autotaxis de las Islas Baleares, integrada en CAEB y en la Federación Empresarial Balear de Transporte, ha abierto un nuevo frente de batalla en el Ayuntamiento de Ibiza, instando a que se obligue a la presencia del ‘botón de pánico’, el cual no se encuentra conectado en todos los taxis, tal como establece el reglamento de Vila y el convenio con la Federación Insular del Taxi de la Isla de Ibiza.
La Agrupación, activa en Ibiza con las acciones en firma de Joan Marí, ya denunció -por ejemplo- ante el Consell, el Govern y el Ayuntamiento de Ibiza las irregularidades confesas en la asignación de los servicios y los problemas del sistema de GPS, gestionado por la FITIE.
Botón de pánico, según convenio
En esta oportunidad través de una reclamación, le pide al Ayuntamiento que “haga cumplir el convenio firmado con la FITIE y obligue al operador a instalar en todos los equipos de los taxis del municipio la correspondiente conexión con los servicios municipales y con el SEIB112, y muestre una preocupación real por la seguridad del colectivo de taxis”.
Así, el convenio firmado por la FITE, que es el operador de la gestión del GPS en los taxis del municipio, obliga al cumplimiento del Reglamento de gestión mediante tecnología de posicionamiento por satélite de la flota del servicio de taxi en el municipio de Ibiza.
Joan Marí recuerda que allí “se establece que los equipos instalados para prestar este servicio deberán estar conectados con los servicios municipales correspondientes y con el Servicio de Emergencias de las Islas Baleares-SEIB 112”.
“Ante las manifestaciones públicas hechas recientemente por el presidente de FITIE, Toni Roig, respecto a la inseguridad que sufren los/las taxistas en el desarrollo de su actividad, frente a una serie de situaciones desagradables padecidas por taxistas, y solicitando una aplicación que esté conectada al 112 en caso de emergencia”, apunta.
El reglamento
El 1º de junio del año pasado, se ha publicado en el Boletín Oficial de las Islas Baleares el Reglamento de la gestión mediante tecnología de posicionamiento por satélite de la flota del servicio de transporte urbano de viajeros en automóviles ligeros de alquiler con conductor del Ayuntamiento de Ibiza. Este ya contemplaba el famoso ‘botón de pánico’.
La normativa tenía como objetivo la “modernización y el incremento de la competitividad de las empresas del sector mediante la aplicación de las tecnologías de localización de vehículos vía satélite, la cartografía aplicada, los sistemas de información geográfica y las tecnologías de la comunicación a través de la telefonía móvil e Internet contribuyen a satisfacer eficazmente estas demandas y necesidades, además de mejorar las condiciones de seguridad personal de los taxistas en el ejercicio de su actividad profesional”.
Justamente, en cuanto a este último punto, preveía que estos equipos “deberán estar conectados con los servicios municipales correspondientes y con el Servicio de Emergencias de las Islas Baleares – SEIB 112”.
Este servicio de gestión integral de flotas de auto-taxi mediante central y con tecnología de posicionamiento por satélite, permite un sistema de comunicación entre los conductores de los vehículos y la central y de asignación de manera automática de los auto-taxis a cada servicio solicitado por los usuarios a la central.
Además, cuenta con un botón de emergencia que, en caso de ser accionado, se inicia el protocolo de emergencia. “En este caso, en la central se recibirá la alarma del vehículo que está siendo atacado así como su identificación. Inmediatamente el visualizador del mapa de posicionamiento por satélite mostrará la posición exacta del vehículo y todos los vehículos de la flota recibirán en sus terminales de datos un mensaje en pantalla informándoles de la alarma junto con la identificación y posición del vehículo atacado. A partir de ahí, el sistema realizará un seguimiento en tiempo real del vehículo atacado”, detalla el Reglamento.
Algunos sí, otros no
Por su parte, Toni Roig, presidente de la Federació Insular ha explicado que antinguamente los llevaban casi todos los vehículos, pero desde un tiempo a esta parte ya no se monta. Algunos todavía lo llevamos, lo pida o no el ayuntamiento».
Lo que tenemos hoy que puede ejercer del mismo modo es la aplicación Zello y por allí pulsamos y se habla como un walkie talkie; a la central o a cualquiera de los compañeros para una llamada de socorro verbal. En cambio, el botón, que es silencioso, es una llamada de emergencia que activaba un protocolo derivado en la central y no directamente en la Policía o el 112″.
Roig detalla que “la central ve el posicionamiento del vehículo y, a través del protocolo, hace la llamada a quien corresponda. Es decir, hace de intermediario. Bajo el punto de vista nuestro es un proceso largo, es un proceso que requiere de la intermediación en este caso de la propia central y aparte muchas veces era un poco el cuento del lobo y las ovejas por errores en la activación”, ha apuntado a La Voz de Ibiza.
Por otra parte, ha dicho que el taxista que no tiene ese sistema, “y por reglamentación debiera de tenerlo, debería de ir y ponerlo. Nadie ha dado órdenes de que se quite ni nada por el estilo”.