La alarma social por la presencia de serpientes en Ibiza y Formentera ha traspasado fronteras y ha calado hondo entre los turistas italianos, que en las últimas semanas han convertido este asunto en uno de los temas más buscados y comentados en internet.
Justo al inicio del verano, las consultas sobre “serpenti Ibiza”, “serpenti Formentera”, “biacco Ibiza”, “emergenza serpenti Ibiza” y “serpenti marini” han escalado en Google, reflejando una preocupación creciente sobre la supuesta gravedad de la invasión de ofidios en las islas.
La difusión de noticias en grandes medios italianos y británicos, sumada a vídeos y testimonios compartidos en redes sociales, ha disparado una ola de inquietud en la que se mezclan preguntas sobre la peligrosidad real de las serpientes, dudas sobre si es seguro bañarse o recorrer el campo, y hasta el temor de que la experiencia vacacional en las Pitiusas pueda verse alterada por la presencia inesperada de estos animales.
Un fenómeno mediático y digital sin precedentes
La cascada de búsquedas y mensajes en redes muestra hasta qué punto el asunto de las serpientes ha calado entre quienes planean visitar Ibiza y Formentera este verano.
El interés se ha concentrado en Italia, donde la prensa nacional ha destacado titulares sobre la “emergenza serpenti” y ha recogido declaraciones de turistas que aseguran haber visto serpientes en playas o zonas rurales.
Al mismo tiempo, diarios británicos han publicado reportajes en los que se describen avistamientos de serpientes en el agua y el miedo de algunos visitantes a encontrarlas mientras se bañan o pasean. Este efecto multiplicador ha llevado a que, en foros y chats de WhatsApp, las dudas y la inquietud vayan en aumento, sobre todo respecto a la especie conocida como biacco, común en Italia, y que muchos asocian ahora con la fauna de Ibiza.
En las búsquedas y conversaciones se repiten preguntas sobre si existen especies venenosas en las islas, si hay riesgo de mordedura, cómo identificarlas y qué hacer en caso de encontrarse con una.
También se consulta con insistencia sobre la presencia de serpientes en Formentera, donde el fenómeno es mucho menos acusado, aunque la preocupación, impulsada por la viralidad informativa, se extiende a ambas islas. El miedo no se limita solo a quienes viajan con niños: incluso parejas jóvenes y grupos de amigos muestran inquietud y buscan detalles sobre la situación real, posibles consejos de prevención y la opinión de las autoridades sanitarias y medioambientales.
La realidad en Ibiza y Formentera: una amenaza para la fauna local
Lo que sí está fuera de toda duda es que, desde hace más de dos décadas, Ibiza vive un proceso de expansión de serpientes, sobre todo de la culebra de herradura (Hemorrhois hippocrepis). La llegada accidental de esta especie, oculta en el cepellón de olivos ornamentales procedentes de la península, ha permitido que colonice el 90% de la isla, con un impacto grave sobre la lagartija pitiusa, un reptil endémico que se encuentra ahora en serio peligro de extinción.
Según los últimos datos de la Conselleria balear de Medio Ambiente y del COFIB, solo en 2024 se han capturado más de 3.000 serpientes en Ibiza y cerca de 500 en Formentera, y el control resulta cada vez más complicado. Las campañas de trampeo, formación ciudadana y vigilancia siguen activas, pero los técnicos reconocen que la erradicación total es inviable y que el trabajo ahora es, sobre todo, de contención.
No obstante, desde los organismos oficiales insisten en que la especie dominante en Ibiza y Formentera no es venenosa ni representa un peligro para las personas. No se han registrado incidentes graves ni ataques a turistas, y los avistamientos en playas o núcleos urbanos son anecdóticos en comparación con el tamaño del territorio.
Los expertos sí advierten del daño ecológico y del riesgo para la biodiversidad, pero recalcan que la alarma generada en internet sobre un supuesto riesgo directo para los bañistas o excursionistas no se corresponde con la realidad documentada.
Qué hacer si ves una serpiente o sufres una mordedura
Las autoridades locales recomiendan mantener la calma ante cualquier avistamiento. En caso de ver una serpiente, lo primero es no intentar capturarla ni matarla, y avisar al 112 o al teléfono de emergencias medioambientales de Baleares, que coordina la retirada y el registro de ejemplares. Si se produce una mordedura –algo extremadamente poco frecuente y, en todo caso, por una especie no venenosa–, se aconseja limpiar la herida con agua y jabón, acudir a un centro de salud para la valoración y evitar manipulaciones innecesarias.
En general, las serpientes evitan el contacto con las personas y solo muerden si se sienten amenazadas o acorraladas.
La presencia de serpientes en Ibiza y Formentera seguirá generando titulares y búsquedas durante este verano, especialmente mientras continúe la difusión de vídeos, noticias y rumores en redes sociales. Las autoridades y los científicos insisten en la importancia de la información rigurosa y en no contribuir a la alarma social, recordando que el riesgo real para los turistas es mínimo.
Aun así, el desafío ecológico que supone la expansión de especies invasoras permanece como una de las grandes preocupaciones ambientales de las Pitiusas.
Si se tienen dudas sobre el tipo de serpiente que ha realizado el ataque se puede contactar con el COFIB en el número 653574145 para comunicar su localización. Asimismo desde el organismo ofrecerán ayuda para reconocer el ejemplar y saber cómo proceder. Finalmente se recomienda notificar la incidencia en la la página web www.lineaverdecofib.es.
