Semanas atrás, La Voz de Ibiza contó la muerte de un paciente de 35 años que falleció en una ambulancia a escasos minutos de llegar al hospital. El caso había sido denunciado por los sindicatos CCOO y USA como un ejemplo de los riesgos en los que se incurre por contar con vehículos que carecen de elementos sanitarios básicos, como un pulsímetro, un tensiómetro o un glucómetro. Este instrumental estaría valorado en poco más de 100 euros.
Según relató el conductor sobre ese momento, al advertir la gravedad del estado del paciente, y al no contar con más personal en el vehículo, decidió frenar y contactar a la central. No obstante, ante la carencia de material para medir las constantes vitales, no pudo entregar datos clínicos clave.
Desde el Govern, sin embargo, han matizado ese caso y la denuncia de más equipamiento. “El suceso se produjo en una ambulancia de transporte programado. Estos vehículos no dan asistencia sanitaria y no están asistidas por personal sanitario”, han señalado desde IB Salut ante la consulta de La Voz de Ibiza.
Según la explicación del servicio de salud autonómico, “la petición que hacen los sindicatos del personal de este tipo de transporte no tiene cabida”, ya que ese tipo de transportes son ambulancias no asistidas, según lo explica el Real Decreto 836-2012.
El polémico decreto
Ese decreto establece “las características técnicas, el equipamiento sanitario y la dotación de personal de los vehículos de transporte sanitario por carretera”.
Allí se distinguen transportes sanitarios y no sanitarios. Entre estos últimos, los hay de dos clases: ambulancias de clase A1, o convencionales, destinadas al transporte de pacientes en camilla; y ambulancias de clase A2, o de transporte colectivo, acondicionadas para el transporte conjunto de enfermos cuyo traslado no revista carácter de urgencia, ni estén aquejados de enfermedades infecto-contagiosas.
El caso en el que falleció un paciente era una ambulancia de clase A2. Era un traslado no urgente, sino programado, ya que iba a diálisis. “Es verdad que se les llama ambulancias y eso hace que pensemos en asistencia sanitaria, pero es simplemente un servicio de transporte”, han enfatizado desde IB Salut.
Cruces
Desde el Govern han insistido que “en ningún caso está contemplado el material que se reclama. Además, el personal que trabaja en este transporte es personal no sanitario, por lo tanto, ellos tampoco tienen la titulación requerida para hacer uso del material”.
Esta afirmación ha sido matizada por representantes sindicales.
Por un lado, en relación a la titulación del personal, José Manuel Romero, de CCOO, aclara que si bien para conducir un vehículo de clase A2 no se exige titulación sanitaria, muchos de quienes han sido asignados a conducir estas ambulancias sí son técnicos en emergencias sanitarias. Pero, al no conducir un vehículo que preste este servicio, cobran por debajo de su titulación. “El técnico en emergencias puede hacer ambos trabajos”, resume.
Por otro lado, Romero ha admitido que no están obligados a llevar material sanitario en estos transportes. Pero que les han dado oxígeno y les han provisto de “un DESA para emplear en el caso de un paro cardiorrespiratorio”.
Por ello, considera que “es contradictorio” que se les niegue, por ejemplo, un glucómetro para medir la bajada de azúcar”.
La Voz de Ibiza ha consultado a IB Salut sobre la provisión de oxígeno y de DESA en estas ambulancias. Desde el organismo del Govern aún no han confirmado ni desmentido la versión sindical.