Una corriente de aguas fecales desembocó este martes en la playa de Caló des Moro, en el municipio de Sant Antoni, sin que las autoridades municipales o los socorristas activaran ningún protocolo de prevención o señalización. El vertido fue grabado por un vecino a las 15.00 horas, en plena zona turística de ses Variades, y muestra cómo los residuos fluyen al mar mientras los turistas se retiran apresurados al detectar el mal olor y el origen de la corriente.
Restos visibles en la orilla y ausencia de medidas
La plataforma ecologista Salvem sa Badia alertó del incidente tras recibir el vídeo y se desplazó a la zona media hora después. Allí encontraron un camión municipal rociando la vía con agua y lejía, pero sin presencia policial ni avisos en la playa. Según la organización, la escena era preocupante: el acceso al mar seguía abierto y las rocas estaban cubiertas de toallitas, compresas y restos fecales.
Salvem sa Badia recogió muestras del agua y reclamó la publicación de los análisis bacteriológicos obligatorios que, por protocolo, debe realizar el Ayuntamiento. Denuncian que la playa no fue señalizada en ningún momento, ni durante ni después del suceso, lo que supone un riesgo sanitario directo para los bañistas.
Segundo vertido en tres semanas en la bahía de Portmany
El vertido se originó tras un atasco en la red de alcantarillado en la confluencia de las calles Soledat e Isidor Macabich. Las aguas residuales se filtraron a la red de pluviales y descendieron hasta el mar a través de tres salidas situadas bajo el paseo marítimo.
Este incidente se suma a otro ocurrido hace apenas veinte días en Punta Xinxó, también en Sant Antoni, donde se repitió el mismo patrón: contaminación visible y ausencia de medidas inmediatas por parte de las autoridades.
“Es evidente que se produjo un fallo de protocolo y de intercambio de información entre quienes gestionan las incidencias en las calles y quienes lo hacen en la zona costera”, denunció la plataforma.
La entidad ecologista exige una revisión integral de los protocolos de actuación ante vertidos, así como mayor transparencia y rapidez en la comunicación con la ciudadanía.
El Ayuntamiento señala un mal uso de la red de alcantarillado
El Ayuntamiento de Sant Antoni informó luego de la denuncia que es «consciente de que ayer hubo una obstrucción del alcantarillado dentro del núcleo urbano». El Consistorio informó que «en las labores de recuperación y desatasco, provocada por un mal uso de la red de alcantarillado, se produjo un vertido a la red de pluviales por gravedad que acaba en la zona cercana a la playa de Caló des Moro».
Estas tareas, señaló el Ayuntamiento, generaron restos del lavado «que llegaron por gravedad a la zona de las rocas».
«Desde el primer momento se procedió con el protocolo que se sigue en estas situaciones y no se apreció un impacto en la zona de baño. No obstante, como siempre en estos incidentes, se cogieron muestras para su análisis y, además, se realizaron tareas de vigilancia en todo momento de la zona de baño», informó el Ayuntamiento. Y agregó: «A primera hora de la mañana se ha revisado de nuevo, corroborando que no presentaba ningún tipo de impacto ni afectación en la zona de baño, con lo cual se ha procedido con normalidad, tal como marca el protocolo».