Vecinos y comerciantes de Ibiza han presentado alegaciones contra el Plan Especial del Puerto. En ellas, denuncian que el cierre del aparcamiento de Es Pratet, con más de 1.100 plazas, pone en riesgo la movilidad de la ciudad y la actividad económica del centro histórico.
Las alegaciones, a las que ha accedido La Voz de Ibiza, han sido firmadas por Joaquín Manuel Senén, presidente de la Asociación de Vecinos y Comerciantes de las calles limítrofes al Puerto de Ibiza y de la Asociación de Vecinos y Comerciantes del Puerto de Ibiza, en representación de ambas entidades.
“Una amenaza directa a la vida urbana”
Senén subraya que el aparcamiento de Es Pratet “ha funcionado durante más de una década como infraestructura crítica para absorber la presión de vehículos” y advierte de que su desaparición “no es una cuestión menor, sino una amenaza directa a la funcionalidad urbana y al equilibrio entre desarrollo portuario y vida ciudadana”.
El dirigente vecinal sostiene que las 700 plazas previstas en el futuro parking subterráneo de la nueva terminal marítima “no compensan ni en número ni en localización la pérdida de Es Pratet”, lo que provocará más tráfico improductivo, contaminación y la “expulsión del vecino del centro urbano”.
Petición de alternativas inmediatas
Las asociaciones reclaman que se mantenga provisionalmente Es Pratet en uso hasta que existan alternativas reales y eficaces, así como la creación de un nuevo aparcamiento público rotatorio en las Áreas 2 y 3 del puerto, incluso en modalidad modular o en altura. “No se puede eliminar una bolsa de más de mil plazas sin ofrecer una solución inmediata. Eso es condenar a la desertificación comercial y al colapso circulatorio”, argumenta Senén.
Además, la Asociación de Vecinos y Comerciantes del Puerto pide al Ayuntamiento disponga de las explanadas de Es Martell y Sa Riba para actos sociales y culturales, evitando la burocracia derivada de la doble administración entre Consistorio y Autoridad Portuaria.
Movilidad en crisis
En sus alegaciones, los vecinos denuncian que el Plan Especial ha sido diseñado con una visión “fragmentaria y desconectada de la vida real de la ciudad” y reclaman un programa de movilidad transitorio que incluya parkings desmontables, servicios de lanzadera en temporada alta y reservas de plazas bonificadas para residentes y trabajadores.
El presidente de ambas asociaciones insiste en que el puerto no debe evolucionar “a costa del bienestar de sus ciudadanos, sino como una infraestructura abierta, integrada y sostenible”.
Idas y vueltas
El pasado mes de mayo, la Junta de Gobierno Local dio luz verde a la segunda versión del Plan Especial, abriendo un nuevo periodo de alegaciones públicas. Es en este marco donde las asociaciones vecinales y comerciales han presentado sus escritos para reclamar soluciones concretas al cierre del aparcamiento de Es Pratet.
El Plan Especial del Puerto de Ibiza llega a su segunda aprobación inicial rodeado de polémica y de errores en la documentación, que han generado confusión entre los afectados. La falta de claridad sobre el alcance real de la reordenación generó “desconcierto total” entre vecinos, comerciantes y empresarios, que denunciaron no entender cómo se verían afectados sus negocios y viviendas.