Siete de los ocho consellers de Sa Unió que forman parte del equipo de gobierno del Consell Insular de Formentera han presentado su dimisión de sus responsabilidades de gobierno. Según ha podido saber La Voz de Ibiza, Artal Mayans, conseller de Turismo, no ha dimitido, información que Sa Unió ha tratado de ocultar, explicando que ha sido la totalidad de los conselleres los que dieron un paso al costado.
«Ante el comportamiento irracional y temerario del presidente, que solo piensa en el sillón, los consellers de Sa Unió con competencias hemos presentado nuestra renuncia como miembros de la Junta de Gobierno, como vicepresidentes y como consellers del Equipo de Gobierno», declararon los consellers renunciantes una nota de prensa donde se refieren a «los 8 consellers».
La renuncia colectiva se produce en medio de una profunda crisis de confianza con el presidente del Consell, Lorenzo Córdoba, quien inicialmente ha decidido no aceptar las renuncias basándose en la ley de Consells que le otorga dicha potestad.
En este contexto, el presidente ha manifestado que va a pedir informes a los servicios jurídicos para saber si tiene la obligación de aceptar dichas dimisiones y cómo van a afectar al funcionamiento de la institución. “Esta dimisión de parte de los consellers va a crear un grave problema a la gobernabilidad del Consell Insular, y más aún al inicio de la temporada turística”, ha recordado el presidente.
Inclusive fue el secretario, Ángel Custodio Navarro, quien advirtió meses atrás que la dimisión de un conseller para ser efectiva debía contar con la aceptación del presidente. Lo recoge expresamente el artículo 32 de la Ley 4/2022 de Consells aprobada por el Parlament. Una de las vías para que el cese de un conseller sea efectivo es la «renuncia comunicada por escrito y aceptada por el presidente«.
Tras la presentación de las dimisiones, el presidente del Consell Insular de Formentera, Lorenzo Córdoba, rechazó el ultimátum de Sa Unió y calificó su propuesta como «vergonzosa y cobarde».
Córdoba criticó que los consellers prioricen los intereses individuales sobre los de la población de Formentera y anunció que pedirá informes jurídicos para evaluar el impacto de las dimisiones en la gobernabilidad de la institución, especialmente al inicio de la temporada turística.
«Esta dimisión de parte de los consellers va a crear un grave problema a la gobernabilidad del Consell Insular, y más aún al inicio de la temporada turística», manifestó Córdoba.
Así no se puede continuar dice Sa Unió
Los conselleres de Sa Unió han admitido: «Todos somos conscientes de que el Consell Insular de Formentera no puede continuar de esta manera los 3 años que quedan de legislatura. Los 8 consellers de Sa Unió tenemos la capacidad y somos capaces de seguir adelante con este gobierno, pero eso es imposible con Llorenç Córdoba como presidente».
Asimismo, profundizaron en el tiempo invertido en esta crisis, explicando que «llevamos meses pidiendo su dimisión por su falta de ética, falta de confianza, por no sacar el trabajo y por crear problemas en lugar de dar soluciones. La lógica nos dice que si alguien tuviera que dimitir para que el gobierno pudiera continuar debería ser 1 para que continuaran los otros 8, y no 8 para que continuara 1. Pues bien, este hecho absurdo es lo que ha pasado hoy»
Mediante su comunicado, Sa Unió subraya que «las áreas paralizadas y con más conflictos son precisamente las del presidente». Señalaron además: «No hace falta recordar cómo se dejaron perder las subvenciones para los ganaderos el año pasado o cómo tiene abandonada el área. Tampoco hace falta recordar sus maniobras con la adjudicación de los quioscos, que han provocado que a día de hoy aún no hayan podido abrir».
También, insistieron en las quejas generalizadas para con Córdoba: «Si con todas sus competencias no tenía suficiente, después de cesar al conseller Alcaraz, también asumió las áreas de Promoción Económica y Administración Insular. Las consecuencias de esta decisión, evidentemente, han sido nefastas para estas áreas debido sobre todo a la falta de impulso y tiempo que les puede dedicar. Las quejas de los trabajadores de estas áreas son constantes y, no hace mucho, también hemos podido escuchar las quejas de la PIME al respecto».
Finalmente, y en un intento por llegar a un acuerdo, Sa Unió explica que retiró dos propuestas en contra del presidente durante el pleno de mayo. Sin embargo, la coalición perdió la mayoría absoluta con la expulsión de Córdoba, quien fue señalado por falta de ética y confianza. «Todos somos conscientes de que el Consell Insular de Formentera no puede continuar de esta manera los tres años que quedan de legislatura», indicaron los consellers en su comunicado. «Llevamos meses pidiendo su dimisión por su falta de ética, falta de confianza, por no sacar el trabajo y por crear problemas en lugar de dar soluciones».
«Ante el comportamiento irracional y temerario del presidente, que solo piensa en el sillón, los consellers de Sa Unió con competencias hemos presentado nuestra renuncia como miembros de la Junta de Gobierno, como vicepresidentes y como consellers del Equipo de Gobierno», declararon los consellers renunciantes.
