“Acompáñame a buscar un botón”, es una frase que reconocerán los miles de seguidores en redes sociales de Mercería La Crisálida. Este establecimiento es un antiguo local de A Coruña, fundado en 1942, que podría haber caído en el olvido, pero al que su nuevo dueño salvó de desaparecer. No solo eso: además, convirtió a La Crisálida en un éxito en Instagram (@la_crisalida_merceria) y en Tik Tok (@lacrisalidamerceria).
La ahora famosa mercería (solo en Instagram tiene más de 330.000 seguidores) está ubicada en la zona histórica de San Andrés. Fue fundada por Josefa Seoane para ayudar económicamente a la familia, y luego fue regentada por sus hijos Fernando y Nieves, según detalla El País.


Pero en 2018, los hermanos lo pusieron a la venta, y se interesó por él Ramón Santos, un apasionado de la moda en general y de las danzas y trajes tradicionales de su tierra en particular. Tras largos meses de negociación, Ramón se convirtió en el dueño de La Crisálida.
Su nuevo local estaba lleno de cajas y cajas de artículos vintage, verdaderos tesoros de décadas pasadas y de marcas españolas desaparecidas (como La Japonesa), que él empezó a vender no solo de la manera tradicional, en la tienda física, sino online, con gran éxito. Durante la pandemia, ese fue su sustento.
Sin embargo, después de los dos primeros años, todo cambió cuando decidió abrir una cuenta de Tik Tok. Allí empezó a mostrar las curiosidades que encontraba en La Crisálida: mantones, pañuelos de seda, abanicos, hilos que ya no se consiguen, lazos, etcétera.
Al día de hoy, no ha terminado de abrir todas las cajas que le dejaron los hermanos Seoane y, cada tanto, muestra a su comunidad digital qué tesoros esconden algunas de ellas, sorprendiéndose él mismo frente a la cámara.

Además, tiene un canal de YouTube y un podcast en Spotify. Santos no solo muestra curiosidades vintage, sino que también convoca a expertos para diferentes temas de conversación, hace hincapié en la importancia de la costura tradicional y se posiciona lejos de la fast fashion.

