Vecinos y vecinas de Sant Miquel han denunciado públicamente las graves deficiencias en las obras de reasfaltado del Camí des Pla Roig, una actuación incluida dentro del Pla 5 de infraestructuras. Según exponen, la carretera ha quedado más estrecha y con márgenes peligrosos, dificultando el tránsito de vehículos y poniendo en riesgo a conductores y peatones. Algunos accesos a viviendas y terrenos privados han quedado inutilizados, obligando a los residentes a aportar gravilla por su cuenta para solventar el problema.
Desniveles peligrosos y obra acelerada
Las imágenes difundidas muestran un asfaltado ejecutado ‘deprisa y corriendo’, con plazos al límite, según los afectados. Los desniveles entre la calzada y los márgenes son tan elevados que, en caso de orillarse, los vehículos pueden quedar atrapados o dañar los bajos.
El reasfaltado se ha hecho sobre el asfalto viejo sin rebajarlo adecuadamente, agravando los desniveles tras limpiar los laterales con cuchillas demasiado profundas, según han señalado.
La Voz de Ibiza ha consultado al Ayuntamiento sobre esta denuncia, pero el Consistorio no ha respondido aún.
La oposición exige responsabilidades
La Agrupación de Electores de Sant Joan ha recogido la denuncia vecinal y reclama explicaciones al equipo de gobierno por lo que considera una chapuza con fondos públicos. Su portavoz, Santi Marí, afirma que «esta actuación demuestra una total falta de planificación y de control por parte del consistorio» y critica que el Ayuntamiento no haya ofrecido una solución estructural más allá de echar gravilla en puntos concretos.
Santi Marí ha sido tajante: «Exigimos a los responsables del consistorio que vigilen correctamente la ejecución de las obras que contratan. No se puede permitir que una inversión pública derive en una actuación improvisada y peligrosa para los vecinos».
