Ibiza ha arrancado el verano con una inusual concentración de propuestas de arte contemporáneo de gran nivel. El Museo de Arte Contemporáneo (MACE) inauguró la temporada con ‘Present Permanent’, una muestra del afamado pintor mallorquín Miquel Barceló que reúne impactantes lienzos de inspiración rupestre y cerámicas de gran fuerza visual.
Antes de que termine julio
En Sant Joan de Labritja, la artista de origen sirio Zeina Mousalli expone su obra hasta el 29 de julio en la Casa Parroquial, en una propuesta organizada por el Grupo Cultural de Sant Joan.
Y del 12 al 27 de julio se podrá visitar en Ibiza “Ángel Zabala y colectiva de platos”, una exposición organizada por Art amb B que reúne esculturas del artista junto a una colección de platos decorados por más de treinta creadores del Estado. Una propuesta que aúna memoria, tradición e innovación a través del barro y el arte compartido.
Los primeros días de agosto
En la Nave de Ses Salines, el artista neoyorquino Spencer Lewis presenta hasta el 8 de agosto su aclamada exposición ‘La Noche de día’, un proyecto impulsado por el coleccionista Lio Malca.
En Buscastell, el Can Tixedó Art Café acoge “Retrospectiva 2017–2025” de la pintora ibicenca Josefina Torres, una exposición íntima que recorre ocho años de evolución artística centrada en la fractura como lenguaje visual. La muestra, que permanecerá abierta hasta el 6 de agosto, reúne 25 obras de distintas series marcadas por una estética personal y reconocible.
En el municipio de Sant Josep, Cristina Ferrer presenta “Retalls de les Illes Pitiüses”, una muestra de 16 óleos realistas con toques impresionistas en el restaurante Es Xarcu Es Cubells. Las obras retratan elementos icónicos del paisaje y la cultura pitiusa, como los llaüts, el ball pagès o el faro de La Mola, nacidas de fotografías tomadas por la propia artista con el propósito de “llegar al alma de quien los observa”.