Según ha adelantado Insider Gaming, la próxima PlayStation 6 incorporará un Drive extraíble desde su lanzamiento. Esta estrategia, que ya se probó con éxito a mitad de ciclo en la PlayStation 5, responde a la voluntad de la compañía de reducir los costes de fabricación y envío, a la vez que mantiene vivas las opciones para quienes prefieren comprar videojuegos en formato físico.
El sistema permitirá que los usuarios adquieran la consola como versión “digital” o como paquete “tradicional” junto al Drive. También se podrá añadir el lector de discos más adelante, en caso de que el jugador decida actualizar su consola.
Antecedentes en la PlayStation 5
El Drive extraíble debutó de forma limitada en la PS5, un movimiento que Insider Gaming adelantó en septiembre de 2022. La decisión se tomó en un contexto de incertidumbre comercial y arancelaria, y resultó ser un éxito para la compañía.
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Fuentes internas citadas por el portal aseguran que el accesorio cumplió todos los objetivos internos de Sony en cuanto a reducción de costes y logística. Por ello, el modelo se mantendrá en la nueva generación, consolidando un modelo híbrido que atiende a jugadores digitales y coleccionistas por igual.
PS6: diseño más simple y eficiente
Los planes para la PlayStation 6 van más allá del Drive extraíble. Todo apunta a que Sony apostará por un diseño más sencillo y funcional que el de su predecesora, con el objetivo de ganar en eficiencia de producción, espacio de envío y reducción de peso.
Este cambio de enfoque responde a un mercado global marcado por la volatilidad, en el que maximizar cada recurso es clave. Las fuentes consultadas aseguran que la compañía está “firme” en esta decisión salvo que se produzcan cambios de última hora.
El futuro del soporte físico en la era digital
La introducción del Drive extraíble en la PS6 supone un alivio para quienes temían que los juegos físicos quedaran relegados en la próxima generación. De hecho, la decisión confirma que los discos seguirán teniendo cabida, al menos durante un ciclo más.
Para Sony, el Drive desmontable es la manera de ofrecer lo mejor de ambos mundos: una consola preparada para el futuro digital, pero capaz de atender a millones de jugadores que aún confían en el formato físico.
Paralelismos con la PlayStation 5 Slim
Mientras se conocen detalles de la PlayStation 6, Sony sigue revisando su hardware actual. Este mismo mes se espera la llegada de la nueva PlayStation 5 Slim, que incorporará un almacenamiento de 825 GB en lugar del estándar de 1 TB.

Como ocurrió con anteriores revisiones de la PS5, el modelo Slim reducirá peso y volumen, lo que refleja la clara intención de la compañía de ahorrar costes en cada detalle. Una política que se trasladará también a la próxima generación con el nuevo diseño y el Drive extraíble.
La estrategia de Sony: eficiencia y versatilidad
El plan con el Drive busca responder a varios objetivos:
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Reducir costes de producción y transporte, en un momento en que los precios de materias primas y envíos han subido.
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Flexibilizar la oferta al consumidor, que podrá elegir entre consola digital, tradicional o añadir el Drive más adelante.
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Garantizar la continuidad del mercado físico, todavía muy relevante para millones de jugadores.
En definitiva, Sony se asegura un modelo que le permite adaptarse al futuro sin renunciar al presente.
Una generación marcada por la dualidad
La PlayStation 6 llegará en un escenario donde el mercado digital domina, pero el físico aún conserva un nicho sólido. El Drive extraíble refleja esa dualidad: la consola se adapta a quienes compran todo en línea y a quienes aún valoran la colección en estantería.
Lejos de ser un accesorio menor, el Drive se perfila como un elemento clave para la estrategia de Sony en la próxima década.
El Drive marca el rumbo de la PS6
La confirmación de que la PlayStation 6 contará con un Drive extraíble desde el primer día marca un antes y un después en la política de hardware de Sony. La compañía japonesa no solo busca reducir costes en tiempos de incertidumbre, sino también ofrecer un sistema flexible que se adapte a distintos perfiles de jugadores.
Así, los videojuegos en formato físico seguirán presentes al menos una generación más, y el Drive será la pieza clave que conecte el pasado, el presente y el futuro de PlayStation.