Desde hace más de medio siglo, la Pasarela Adlib se ha convertido en la gran cita de la moda ibicenca, un escaparate de creación local que une tradición, artesanía y diseño contemporáneo. Con 54 ediciones a sus espaldas, Adlib es también marca registrada y símbolo cultural de Ibiza, con reconocimiento a nivel nacional e internacional.
La edición de 2025 fue especialmente significativa: por primera vez el evento se celebró en el municipio de Sant Antoni de Portmany, concretamente en el enclave natural de Sa Pedrera, como parte de un impulso por descentralizar la cultura y conectar la moda con el territorio. Más de un centenar de personas participaron en la producción del desfile, que volvió a ser gratuito y abierto al público.
Al frente de la organización estuvo María Fajarnés Costa, consellera de Promoción Económica, Cooperación Municipal y Recursos Humanos del Consell Insular d’Eivissa. Su implicación fue total: desde la planificación hasta el backstage. En esta entrevista, Fajarnés repasa lo vivido en Adlib 2025, adelanta próximos pasos y reafirma su visión: la moda es también una industria que forma parte del presente y el futuro económico de Ibiza.
—¿Con qué balance general se queda tras el cierre de la Pasarela Adlib 2025?
-A ver, un resumen muy positivo, muy gratificante. Empezamos a trabajar la pasarela con un año de antelación. Ahora hace una semana justo que finalizó Adlib 2025 y ya estamos empezando a pensar en el año que viene, porque esto no es una cosa de un día para otro, son muchos meses de trabajo. Ahora estamos valorando los resultados y el feedback que tengo, tanto de diseñadores, como de la prensa local y nacional es muy positivo. O sea que la sensación es muy buena, además también muy contenta porque por primera vez se hizo en el municipio de Sant Antoni de Portmany. Nunca habíamos podido hacer allí un evento de tal magnitud. Sobre todo para contribuir en el cambio de modelo turístico que está llevando a cabo el Ayuntamiento de Sant Antoni, enfocado más en la cultura y la gastronomía.
—¿Es también una forma de descentralizar la moda y extenderla por toda la isla?
-Efectivamente. La idea siempre es intentar que la pasarela se celebre en todos los municipios. Lo que pasa es que cada vez nos resulta más complicado encontrar un espacio donde poder ubicar a mil personas, porque queremos que sea una pasarela abierta al público, que todo el mundo pueda conocer las últimas propuestas de nuestros diseñadores. Y sí, este año tocó San Antonio, en un enclave mágico muy natural. El año anterior, en el 2024, veníamos de poner en valor el patrimonio y este año queríamos poner en valor nuestras raíces, o sea, el origen de Adlib, que viene también de la esencia más pura.
—La logística fue compleja, Sa Pedrera no es una ubicación fácil. ¿Cómo fue la organización?
-Bueno, como te decía, organizar esta pasarela no es cuestión ni de una ni de dos semanas, son muchos meses de trabajo, tanto administrativo como de producción. En las últimas tres semanas hay que llegar al espacio, empezar con los montajes…tuvimos que adecuar el terreno para empezar a construir lo que es la pasarela. A nivel técnico y de montaje, los trabajadores pudieron trabajar a su ritmo y no hubo ninguna incidencia . Estoy agradecida al Ayuntamiento de San Antonio que nos permitió poder utilizar ese espacio, darlo a conocer y ponerlo en valor porque es un enclave único.
—¿Cuánta gente implicó la producción del evento?
-Más de 100 personas trabajando en Pasarela Adlib, tanto con recursos del Consell Insular, como con recursos técnicos de FECOEF, del recinto ferial y luego las empresas subcontratadas que ganan las licitaciones públicas. En total, entre 100 y 180 personas mueve la pasarela.
—¿Qué impacto tiene en la economía local?
-Bueno, sobre todo si las licitaciones las ganan las empresas de la isla, pues estamos fomentando una economía circular y generando puestos de trabajo. De esta maneara el dinero se queda aquí en la isla.
—Y todo esto, además, abierto al público.
-Sí. Es una pasarela abierta y gratuita para todo el público, por eso siempre buscamos espacios grandes donde quepan alrededor de mil personas, para que puedan admirar y poner en valor también la moda de Ibiza.
—La moda Adlib tiene raíces profundas. ¿Cómo mantener esa esencia mientras se moderniza?
-Sin perder la esencia ibicenca de la Pasarela. Es verdad que Adlib no es una moda de hoy, tenemos 54 años y somos la única marca con denominación de origen, y de las pasarelas más antiguas. El reto al que nos enfrentamos es seguir dando a conocer nuestra moda, pero sin perder la esencia de lo que es Ibiza, porque Adlib está relacionado con nuestra artesanía, con nuestra tradición, con nuestra cultura y con nuestro patrimonio y eso no podemos obviarlo.
—¿Cómo vive en lo personal su implicación en un evento como Adlib?
-Significa mucho, es algo que lo vivo, que lo siento, que me gusta poder aportar, no mi granito de arena: me gusta poder supervisar absolutamente todo, lo vivo hasta el último momento. Meterme en backstage, modelos, revisar todo y luego ver el resultado, ver a la gente contenta, ver que Adlib sigue creciendo, que no se queda estancada. Pues es una enorme satisfacción para mí.
—¿Ya están pensando en 2026?
-Del año que viene no te puedo adelantar nada, estamos haciendo valoración de los resultados de este año pero en breve ya nos tenemos que poner otra vez a pensar en 2026. Siempre hay cosas que pulir, porque cada año intentamos mejorar y profesionalizarnos más. Como siempre, intentaremos unir la moda con algún otro concepto como fue patrimonio en 2024 o la naturaleza en esta edición; porque Ibiza tiene mucho que ofrecer.
—Ha dicho en otras entrevistas que esto ya es una industria…
-Claro, Ibiza tiene sol, playa, tiene gastronomía, patrimonio, pero Ibiza también tiene una industria, que es la industria de la moda, y es algo que tenemos que cuidar y seguir trabajando. Por eso debemos promocionar y dar a conocer el talento local que tenemos, que es mucho, y todas las piezas que ellos crean.
—En ese sentido, ¿qué se puede contar sobre el nuevo ciclo de formación en moda?
-Va relacionado con la continuidad de Adlib, que no es una moda de ahora, es una moda que lleva 54 años. Llevábamos muchos años tratando de lograr que los alumnos Ibiza que se quieran formar en cualquiera de los oficios relacionados con la moda no tuvieran que salir de la isla, que lo pudieran hacer aquí. Y ahora lo hemos conseguido, a partir del mes de septiembre se va a poder hacer el grado medio y estamos en proceso también de conseguir que se implante también la formación básica, por tanto aquí tendríamos la básica, la media y la superior.
—¿Habrá otras acciones durante el verano?
-Sí, normalmente ahora vienen sobre todo acciones más de promoción de la marca en editoriales de moda, para que los diseñadores puedan darse a conocer y luego de cara a septiembre, que es el mes de las ferias, vamos a una feria nacional y a una internacional y estamos planificando también una acción a nivel nacional para el sector de bodas.
—¿Cree que Pasarela Adlib tiene techo?
-Es una pregunta complicada, ¿la Pasarela tiene techo? Sí, lógicamente tiene un techo económico, pero techo a nivel creativo y de talento no. Yo creo que Adlib es pasado, es presente y tiene mucho futuro. Así que ya estamos pensando en lo que es el año que viene, el listón ha quedado bastante alto respecto a este año.
