La madrugada de este martes ha vuelto a teñir de luto las carreteras de Álava. Un accidente en Okondo ha causado la muerte de dos jóvenes y ha dejado a otros dos heridos, todos ellos vecinos de esta pequeña localidad alavesa de apenas un millar de habitantes.
El siniestro se suma a otra tragedia ocurrida el lunes en el puerto de Azáceta, donde otro conductor perdió la vida. En total, tres personas han muerto en menos de 24 horas en la red viaria alavesa, lo que ha generado consternación en toda la comunidad.
El accidente en la A-3632
Según informó el Departamento vasco de Seguridad, el suceso ocurrió sobre la una y diez de la madrugada en la carretera A-3632, a la altura del municipio de Okondo. El turismo en el que viajaban los cuatro jóvenes, dos varones y dos mujeres, se salió de la calzada y acabó volcado.
Los bomberos forales del parque de Llodio acudieron de inmediato para rescatar a los ocupantes atrapados en el interior. Posteriormente, los servicios sanitarios les practicaron maniobras de reanimación cardiopulmonar a los dos varones, que presentaban heridas de extrema gravedad.
Dos víctimas mortales y dos heridas por el accidente en Okondo
El conductor del vehículo, un joven de 19 años, falleció en el mismo lugar del accidente pese a los intentos de reanimación. Las otras tres personas fueron trasladadas a un centro hospitalario con heridas de diversa consideración.
Horas después, uno de los heridos, también varón, falleció a consecuencia de la gravedad de sus lesiones. Las dos chicas, vecinas igualmente de Okondo, continúan ingresadas, aunque su evolución aún no ha sido comunicada oficialmente.
Todos los ocupantes del turismo tenían entre 17 y 19 años, lo que acentúa la conmoción en una localidad pequeña donde prácticamente todos los vecinos se conocen.
“Estamos destrozados”
La noticia ha sacudido a la comunidad. El alcalde de Okondo, Jon Escuza, mostró su pesar en declaraciones a El Correo: “Estamos destrozados”, confesó visiblemente afectado.
El Ayuntamiento de Okondo ha convocado un pleno extraordinario para esta misma tarde y ha decretado tres días de luto oficial en memoria de los jóvenes fallecidos. Durante este tiempo, las banderas ondearán a media asta y se espera que vecinos y allegados participen en actos de recuerdo y solidaridad con las familias.
Investigación en marcha por el accidente en Okondo
Las causas del accidente todavía están siendo investigadas por la Ertzaintza. Por el momento, no han trascendido detalles sobre la velocidad del vehículo ni sobre otras posibles circunstancias que pudieron influir en la salida de la vía.
Los agentes de tráfico continúan recopilando pruebas para determinar si el siniestro estuvo relacionado con factores meteorológicos, fallos mecánicos o distracciones al volante.
Ola de consternación en la comunidad
La noticia del accidente en Okondo se ha extendido rápidamente más allá de las fronteras del municipio. Asociaciones juveniles, entidades locales y vecinos de municipios cercanos han expresado su solidaridad con las familias afectadas.
El hecho de que todos los implicados fueran jóvenes de la localidad ha intensificado el impacto emocional. “En un pueblo tan pequeño, todos nos conocemos y esta tragedia la sentimos como propia”, expresaba una vecina a los medios locales.
Un duro verano en las carreteras alavesas
Este siniestro se produce en un contexto especialmente trágico en las carreteras del territorio histórico. En menos de 24 horas, tres jóvenes han perdido la vida en diferentes puntos de Álava.
El accidente en el puerto de Azáceta, ocurrido el lunes por la mañana, ya había generado una ola de dolor. Apenas unas horas después, el choque de Okondo ha duplicado la magnitud de la tragedia.
El accidente en Okondo ha dejado un rastro de dolor profundo en la comunidad alavesa. Con dos jóvenes fallecidos y otros dos heridos, la localidad de apenas mil habitantes se enfrenta a unos días de luto y reflexión.
Mientras las autoridades investigan las causas del siniestro, el recuerdo de las víctimas se convierte en el centro de la vida del municipio, que ha visto cómo en cuestión de horas se apagaban dos vidas demasiado jóvenes.
Okondo y Álava entera lloran hoy a sus vecinos, en una nueva jornada negra que recuerda la importancia de la prudencia en la carretera y el valor de cada vida perdida.