El jueves 2 de octubre, en plena celebración de Yom Kippur, se produjo un brutal ataque frente a la sinagoga Heaton Park Hebrew Congregation en Crumpsall, Manchester. Un vehículo fue arrollado contra fieles congregados en la vía pública y un hombre fue apuñalado. Al menos dos personas murieron y tres resultaron gravemente heridas, según fuentes policiales. Se cree que el atacante fue abatido por agentes armados, aunque la confirmación oficial sobre su muerte sigue pendiente debido a objeto sospechoso hallado junto a él.
Los hechos: coche, cuchillo y temor colectivo
La Greater Manchester Police recibió el aviso poco después de las 9:30 h: testigos alertaban de un coche dirigiéndose contra personas y de un apuñalamiento en los alrededores de la sinagoga. Tras ello, se personaron unidades policiales armadas y declararon el código de emergencia PLATO, destinado a incidentes terroristas activos.
Los servicios de emergencia atendieron a cuatro heridos por heridas combinadas de atropello y arma blanca. Asimismo, la presencia de un posible artefacto explosivo obligó a desplegar un equipo de desactivación de bombas.
Víctimas, nacionalidades y reacciones institucionales
Entre los afectados hay al menos dos muertos y tres heridos graves. Además, numerosos fieles fueron evacuados desde el interior del templo.
El primer ministro británico, Keir Starmer, anunció que regresaría inmediatamente al país para dirigir el comité COBRA de emergencias y reforzar la seguridad en sinagogas de todo Reino Unido. “Que esto ocurra en Yom Kippur lo vuelve aún más atroz”, declaró. El alcalde de Manchester, Andy Burnham, instó a evitar la zona y ofreció solidaridad con la comunidad judía local.
Posibles interpretaciones y contexto antisemita
El hecho de que el ataque coincida con Yom Kippur, el día más sagrado del judaísmo, sugiere un posible componente religioso o simbólico en el atentado. La sinagoga en Crumpsall tiene antecedentes de hostigamientos antisemitas, lo que intensifica la tensión sobre la motivación del agresor.
Además, el uso combinado de vehículo como arma y arma blanca recuerda otros ataques terroristas contemporáneos y apunta a una estrategia mixta de violencia. La presencia del posible explosivo y el despliegue rápido policial elevan el escenario a un acto con características de atentado.
Seguridad, impacto local y reflexiones
La policía ha cerrado la avenida Middleton Road y reforzado la vigilancia en instalaciones religiosas. Varios hospitales metropolitanos fueron puestos en lockdown tras el ataque como medida precautoria.
Para la comunidad judía del Reino Unido, y particularmente en Manchester, el episodio revive el miedo a que la fe sea blanco de violencia. En redes sociales y declaraciones públicas crecieron los llamados a unidad, reflexión y no dejarse vencer por el odio.
