El Consell d’Alcaldes de Ibiza ha constatado la necesidad de reducir de forma significativa la generación de residuos en la isla, en paralelo a la puesta en marcha del plan piloto para el traslado de desechos a Mallorca con el fin de proceder a su incineración en la planta de TIRME, en Son Reus. El respaldo a esta iniciativa se ha formalizado este viernes durante la reunión celebrada en el Ayuntamiento de Sant Joan de Labritja, al amparo del reciente Decreto ley 8/2025, de medidas urgentes para acelerar proyectos estratégicos en Baleares.
De manera complementaria, el presidente del Consell de Ibiza, Vicent Marí, junto a los alcaldes y alcaldesas de la isla, ha acordado diseñar de forma conjunta un plan de choque insular para la reducción de residuos. El objetivo es solicitar la colaboración del Govern balear a través de fondos procedentes del Impuesto de Turismo Sostenible (ITS). Marí ha defendido este modelo de cooperación interadministrativa, recordando el precedente del plan contra el intrusismo, y ha subrayado que, pese a los avances logrados en los últimos años, “todavía hay un amplio margen de mejora” que debe acompañar al traslado de residuos fuera de la isla.
Aunque el contenido concreto del plan deberá definirse en las próximas semanas por los grupos técnicos del Consell y los ayuntamientos, se baraja la puesta en marcha de nuevas ayudas para incentivar la separación y reducción de residuos, campañas de concienciación ciudadana, la creación de nuevos espacios de reciclaje como deixalleries y un mayor control de comportamientos incívicos, entre otras medidas.
En otro punto del orden del día, el Consell d’Alcaldes ha acordado unificar criterios para priorizar las obras hidráulicas necesarias tanto a nivel municipal como autonómico, especialmente tras los episodios de lluvias intensas registrados en septiembre y octubre. En este ámbito, se ha puesto en valor la inversión de cerca de 1,5 millones de euros en actuaciones de emergencia por parte del Consell Insular y los ayuntamientos más afectados, así como los 3 millones de euros aportados por el Govern balear para la recuperación de torrentes, depuradoras y desaladoras.
La reunión también ha servido para abordar la mejora de la red de rampas de varada en la isla, que actualmente cuenta con siete instalaciones. Los ayuntamientos estudiarán aumentar este número y mejorar la accesibilidad y el entorno de las existentes. Por último, la consellera Maria Fajarnés ha informado de que ya se han presentado 108 solicitudes de ayudas por los daños causados por la DANA, en su mayoría relacionadas con viviendas, vehículos y empresas, mientras el presidente del Consell ha reclamado al Estado la publicación urgente en el BOE de la declaración de zona de emergencia para agilizar los trámites y los pagos a los afectados.
