Con el objetivo de controlar las autocaravanas y furgonetas durante la temporada estival, que son un dolor de cabeza en Ibiza, el Ayuntamiento de Ibiza ha tomado la medida de desplazar a estos vehículos de los estacionamientos públicos y proceder a la colocación de gálibos para que no puedan ingresar.
Por eso, este lunes han informado a los habitantes de las caravanas del estacionamiento de Sa Joveria que deben retirarse de allí antes del viernes, cuando se proceda a la instalación de gálibos, que permitirá solo la entrada a turismos.
Según la misiva municipal que el Ayuntamiento ha dejado sobre los vehículos, las caravanas de más de 2.1 metros de altura “deberán retirarse del estacionamiento” antes del viernes o serán retiradas por una grúa municipal.
Con esto, se prohíbe el ingreso de autocaravanas, camiones, camionetas, furgonetas y todo vehículo que supere esa altura. Unas 15 personas que residen allí y trabajan en la zona se resisten a abandonar el lugar.
En marzo pasado, la Policía Local había alertado del desalojo del asentamiento de caravanas ubicado en el solar de Sa Joveria, donde se habían instalado 53 vehículos alojados por trabajadores sin vivienda o turistas que no pueden pagar los elevados precios de los alquileres.
Sin embargo, el procedimiento nunca se concretó, aunque varios de ellos decidieron retirarse ante la advertencia de las autoridades de multas, luego de recibir la pegatina de ‘estado de abandono’.
Segunda fase
El reordenamiento del parking Sa Joveria es el segundo paso que toma el Ayuntamiento de Ibiza. El mes pasado, se instalaron gálibos en el estacionamiento de Pou Santos para permitir allí solo turismos y evitar el ingreso de caravanas para la temporada de verano.