El alcalde de Ibiza, Rafael Triguero, ha reafirmado la importancia de que el futuro Parador en Dalt Vila sea una parte integral de la ciudad, abierta a los residentes y no solo a los turistas.
Esta afirmación se hizo durante una reunión con la presidenta de Paradores de Turismo, Raquel Sánchez, donde también se discutieron los detalles finales de las obras que culminarán en la apertura del Parador a principios de 2025.
En un encuentro celebrado en Can Botino, el alcalde de Ibiza, Rafael Triguero, y la presidenta de Paradores de Turismo, Raquel Sánchez, revisaron los avances de las obras del nuevo Parador de Ibiza, que se prevé abrirá sus puertas a principios de 2025.
Triguero expresó la disposición y colaboración del Ayuntamiento para proyectos conjuntos que beneficien a la ciudadanía y la isla. «El Parador tiene que ser parte de la ciudad de Ibiza y un lugar abierto a los residentes», afirmó Triguero.
El Parador
El futuro Parador, ubicado en Dalt Vila, contará con 66 habitaciones y ha supuesto una inversión de más de 27 millones de euros. Este establecimiento no solo generará empleo de calidad, sino que también contribuirá a la dinamización económica de la zona al mantenerse abierto durante todo el año.
Además, se ha realizado un exhaustivo estudio del complejo, incluyendo la musealización de los hallazgos arqueológicos, para que estos puedan ser conocidos por residentes, investigadores y visitantes.
Durante la reunión, en la que también participaron el concejal de Urbanismo y Patrimonio, Juan Flores, y el secretario general de Paradores, Ricardo Mar, se agradeció la retirada de la grúa tras los trabajos en el Parador, permitiendo que Dalt Vila recupere su perfil característico.
Triguero destacó la importancia de que este proyecto, el primero de la red de Paradores de Turismo en las Islas Baleares, sea un ejemplo de integración y beneficio para toda la comunidad.