La primera jornada de la huelga de basuras en Santa Eulària, Sant Josep y Sant Joan ha tenido consecuencias en la isla de Ibiza. Los contenedores de basura han desbordado, el olor es cada vez más intenso y el impacto ambiental es grande, además de la imagen que deja este hecho para los turistas que llegan en temporada alta.
En las primeras horas de la medida de fuerza, los servicios mínimos pactados han estado incluso por debajo de lo previsto porque los camiones recolectores tenían averías, desperfectos y hasta neumáticos con agujeros que podían comprometer la vida de los trabajadores. En este marco, pocos camiones han salido a recoger la basura que ya lleva horas acumulándose.
Al estar llenos los contenedores, comienzan a caer restos de comida, muebles rotos, ropa y suciedad de animales al suelo y las bolsas se rompen, cayendo directamente a la calle. Es evidente que el impacto ambiental que esto genera es preocupante y parece que no habrá una fecha de finalización.
Huelga indefinida
Al ser una huelga indefinida, no hay una fecha para que se restablezca el servicio de recogida de basuras. Mientras tanto, no hay negociaciones a la vista entre los sindicatos y la patronal, por lo que podría demandar más días de la cuenta un arreglo, mientras la basura en las calles de Ibiza se agranda como montaña.