El consumo de energía eléctrica en las Islas Baleares ha experimentado una leve disminución del 0,2% durante el mes de junio en comparación con el mismo mes del año pasado.
Según los datos ajustados por los efectos de la laboralidad y las temperaturas, la demanda bruta se situó en 535.998 MWh, lo que supone un 0,2% menos que en junio de 2023.
A lo largo del primer semestre de 2024, la demanda total en Baleares ha alcanzado los 2.721.988 MWh, marcando un incremento del 0,4% respecto al mismo periodo del año anterior.
Esta tendencia sugiere un ajuste en los patrones de consumo energético, posiblemente hacia una mayor eficiencia y un uso más consciente.
En términos de generación, el ciclo combinado sigue siendo la principal fuente de energía en las islas, representando el 57% de la producción total en junio.
No obstante, las energías renovables y las tecnologías libres de emisiones de CO2 han incrementado su cuota, alcanzando un 18,2% del total de energía producida en el mes. Este crecimiento supone un aumento del 33,9% en la producción renovable respecto al año anterior.
Además, el enlace submarino entre la Península y Mallorca ha contribuido significativamente a cubrir el 27,2% de la demanda eléctrica balear durante junio. Este enlace se ha convertido en un recurso esencial para mantener el equilibrio del suministro energético en la región, según Redeia.
A nivel nacional, las energías renovables han mostrado un notable crecimiento, con la solar fotovoltaica liderando el mix de generación por segundo mes consecutivo y aportando un 22,2% del total de producción.
En general, el 80,3% de la electricidad generada en España en junio de 2024 fue libre de emisiones de CO2, subrayando el avance hacia una matriz energética más sostenible.
Estos datos reflejan la importancia de continuar promoviendo políticas de sostenibilidad y eficiencia energética en Baleares y en toda España, con el objetivo de garantizar un futuro más verde y responsable en el ámbito energético.
