El Grupo Socialista en el Consell de Formentera ha calificado el pleno ordinario celebrado hoy como «un espectáculo vergonzoso e indigno de unos representantes políticos», en referencia al constante enfrentamiento protagonizado por el presidente Llorenç Córdoba y los consellers de Sa Unió.
«Con la vergüenza que hemos vivido hoy, no podemos sorprendernos de que entre la ciudadanía haya una desafección tan grande hacia la política», ha lamentado el conseller Rafa Ramírez.
Ramírez ha recordado que el pleno del Consell de Formentera es el órgano de máxima representación política de los ciudadanos en el gobierno municipal y que «lo que ha pasado hoy dista mucho de lo que esperan los ciudadanos de su Consell».
Según el conseller socialista, el pleno debería ser un espacio para debatir y proponer soluciones a los problemas de la ciudadanía, pero en la actualidad, esto es imposible debido a las constantes disputas.
Además, los socialistas han solicitado la convocatoria de la comisión de Código Ético, aprobada en el pleno pasado de marzo, y han denunciado que «no se están cumpliendo algunas de las funciones del presidente del Consell».
Han acusado a Córdoba de falta de transparencia, afirmando que «no hay actas, se toman decisiones, pero no tenemos la documentación; ahora mismo, la institución está secuestrada».
Cuestión de confianza
El PSOE también ha pedido al presidente que se someta a la cuestión de confianza, que hoy se ha aprobado con los votos a favor de todos los grupos políticos y la abstención del propio presidente.
Ramírez ha destacado como ejemplo de la inacción del gobierno actual que las ayudas individuales a personas vulnerables llevan meses de retraso, y ha criticado a Córdoba por ser «un apagafuegos que no genera ninguna confianza ni impulso político».
