El regreso del hidroavión a Ibiza va dando pasos sin que pueda afirmarse que acabará siendo una realidad. El martes hubo pruebas en el puerto de Palma y el miércoles, en el de Ibiza. El resultado de las mismas invita a la cautela por los efectos de los vientos de levante en la zona autorizada por Capitanía Marítima para el amerizaje y despegue de las hidronaves.
La expedición no ha servido para que la compañía desvele quién está detrás del proyecto. La voz cantante ha sido el delegado en Baleares, Antoni Jiménez.
La Voz de Ibiza solicitó entrevistar sin éxito al CEO de la compañía y consejero delegado, Sergio Núñez-Cacho Solans, y a uno de los socios minoritarios, Klaus Dieter Martin. Ambos estaban presentes en las pruebas del miércoles, al contrario que el accionista mayoritario.
El precedente de Croacia
Klaus Dieter Martin está detrás de European Sea Plane Service GMBH, empresa alemana constituida en 2018 y que es consejera de Isla Air Express, SL.
No se trata, sin embargo, de la primera vez que Dieter Martin está detrás de la implantación de líneas regulares con hidroaviones.
No en vano, fue dueño de una empresa que impulso un proyecto fallido en Croacia. Luego de dos años de operar (y de numerosas quejas de usuarios), sus hidroaviones fueron inhabilitados por cuestiones de seguridad.
Klaus Dieter Martin, está detrás de European Coastal Airlines, la empresa croata que prometía unir la costa balcánica con Italia y otros destinos y que tuvo un triste final.
Según señalaron desde Isla Air Express a La Voz de Ibiza, Dieter Martin es un socio minoritario de la empresa. Desde la compañía evitaron hacer declaraciones al respecto, como también puntualizar quién es su principal accionista.
En concreto, European Coastal Airlines operó entre 2014 y 2016. Su principal terminal estaba en el puerto de Split, la segunda ciudad del país balcánico. Además de conectar puertos croatas, también abrió una ruta entre Split y Ancona y Pescara, Italia.
La flota que puede verse en el sitio oficial de Isla Air Express es la misma que operó en las cosas balcánicas hace ocho años.
Final abrupto en plena expansión
La empresa estaba en expansión, pero sus vuelos tuvieron un final abrupto. En agosto de 2016, el portal croata Index publicó una investigación en la cual hablaba de “omisiones peligrosas” en el mantenimiento de los hidroaviones, y alertaba de que, si no se tomaban medidas, era solo cuestión de tiempo para que se produjeran accidentes y víctimas fatales.

“Si la inspección o la Agencia de Aviación Civil no se lo impiden, el accidente es sólo cuestión de días. Y el público simplemente necesita saberlo», contó al medio un expiloto.
La publicación denunciaba: “Los procedimientos de mantenimiento que deberían ser de rutina se llevan a cabo de manera descuidada y solo lo suficiente para satisfacer la forma, algunas de las partes vitales del hidroavión se descuidan hasta tal punto que se debilitan y agrietan debido a la corrosión y la influencia del mar. Como resultado, cada vez se producen más averías y se improvisan repuestos, lo cual es completamente ilegal y extremadamente peligroso”. También señalaba que se trataba de hidroaviones “anticuados”.


Para entonces, ya se acumulaban en foros numerosas criticas de viajeros a quienes se les habían cancelado vuelos sobre la hora y a quienes no se había dado respuestas satisfactorias.

El ocaso del proyecto de hidroaviones en Croacia
Luego de esto, la Agencia de Aviación Civil de Croacia retiró su permiso para operar por razones de seguridad. Esto derivó en que suspendieran sus operaciones y se perdieran 130 puestos de trabajo.
“La inmovilización no estaba justificada, no se siguieron regulaciones internacionales”, dijo Dieter Martin en una entrevista con el Total Croatia en octubre del 2016. Por entonces, apostaba a volver a operar al año siguiente y tenía planes ambiciosos de expandir el negocio a otros países, como Grecia y Montenegro.