La isla de Ibiza enfrentó una doble crisis durante el desarrollo de la DANA Alice y las tradicionales “closing parties”: mientras la Guardia Civil desplegaba un amplio dispositivo de emergencia para combatir las intensas lluvias y sus consecuencias en la red viaria, se detectaba una ola de infracciones administrativas por conducir bajo los efectos del alcohol y las drogas.
El contexto meteorológico, marcado por la DANA Alice, sumado al elevado flujo de vehículos propio del cierre de la temporada de discotecas, supuso un reto adicional para las fuerzas de seguridad durante los últimos días. Los agentes de la Agrupación de Tráfico tuvieron que centrar sus esfuerzos en evitar la circulación en vías anegadas, estableciendo desvíos alternativos para garantizar la seguridad de los usuarios.
Emergencia vial y auxilios críticos
Durante las horas de mayor intensidad meteorológica, la Guardia Civil ha informado este jueves que no solo llevó a cabo una revisión exhaustiva de la red viaria sino que también realizó auxilios a ciudadanos atrapados en sus vehículos. La emergencia fue tal que se procedió a la señalización y corte simultáneo de cuatro carreteras anegadas por la lluvia.
La rápida actuación fue fundamental para minimizar los riesgos derivados de las condiciones extremas y el mal estado de las carreteras. Incluso se estableció un Plan Alternativo de Movilidad coordinado con otros organismos para mantener la fluidez del tráfico, especialmente en los accesos al Aeropuerto de Ibiza, buscando garantizar la conectividad aérea de la isla.
El contraste de los controles: alcohol y estupefacientes
En el marco de estos dispositivos de vigilancia y control, que fueron reforzados con efectivos procedentes de Mallorca y Menorca, los agentes realizaron pruebas de alcoholemia y detección de drogas con el fin de incrementar la presencia policial y prevenir siniestros viales.
Los resultados de estos controles reflejaron los excesos de algunos conductores en plena emergencia. Se detectaron numerosas infracciones administrativas por conducir con tasas de alcohol superiores a las permitidas. A ello se sumaron infracciones administrativas por conducir con presencia de estupefacientes en el organismo.

Este operativo se enmarca en la estrategia del Sector de Tráfico de Illes Balears para garantizar la seguridad en las carreteras del archipiélago durante eventos de ocio nocturno mundialmente reconocidos y momentos de alto tránsito viario.
Tolerancia cero y riesgo multiplicado
Ante la evidencia de conductores bajo los efectos de sustancias prohibidas, la Guardia Civil reforzó su mensaje de tolerancia cero al consumo de alcohol y drogas al volante. Las autoridades recuerdan que la conducción bajo los efectos de estas sustancias pone en peligro no solo la vida del conductor, sino también la de todos los usuarios de la vía.
Este riesgo se ve drásticamente incrementado cuando las inclemencias meteorológicas se hacen presentes: las lluvias intensas, el estado resbaladizo del firme y la visibilidad reducida aumentan significativamente el riesgo de accidentes, haciendo imprescindible extremar la precaución y consultar el estado de las carreteras antes de iniciar cualquier traslado.