Más de un año después de las históricas pruebas en aguas de Ibiza, que ilusionaban con el regreso de un servicio de hidroaviones a la isla pitiusa, la expectativa por una ruta que conecte por aire los puertos de las islas Baleares parece haberse diluido casi por completo.
“No ha habido ningún interés por parte de la administración Balear ni por la Autoridad Portuaria, y estamos negociando con otros puertos de la península”, ha explicado a La Voz de Ibiza Antoni Jiménez, el delegado en Baleares de Isla Air Express, la compañía que busca ofrecer el servicio de vuelos entre puertos. De hecho, ha dicho que “están pendientes de realizar pruebas en otros puertos de España”.
Aunque no ha querido precisar cuáles, el propio Jiménez, en una entrevista concedida en julio a Mallorca Diario, había dicho que habían iniciado conversaciones para volar desde Valencia y desde Barcelona.
“No descartamos operar en Baleares, pero visto el entusiasmo que hay aquí, buscamos otras alternativas”, ha insistido.
Según Jiménez, desde la compañía han solicitado reuniones con la administración balear y con la Autoridad Portuaria de Baleare (APB). En ambos casos, dice, no tuvieron respuestas para avanzar en el proyecto ni para evaluar juntos los resultados de las pruebas realizadas.
Jiménez tampoco precisó a este medio cuál es el interlocutor principal que tiene la compañía en el Govern. La Voz de Ibiza ha consultado a la Consellería del Mar y del Ciclo del Agua, que ha negado mantener contactos con la empresa. La APB no ha confirmado contactos con Isla Air Express en los últimos meses.
Normativa
Jiménez había señalado hace casi un año a La Voz de Ibiza que todo dependía del Estado, ya que, para que la empresa opere, se requiere que “el Gobierno apruebe un mecanismo para la gestión de las hidrosuperficies, una legislación que aún no existe en España”.
En esa línea, Isla Air Express había colaborado con la Agencia Estatal de Seguridad Aérea (AESA) en un proyecto que “contempla medios aceptables de cumplimiento de diseño y operación de hidrosuperficies y que incorpora comentarios resultantes de un grupo de trabajo con el sector”, según habían explicado desde AESA a La Voz de Ibiza.
Dicho proyecto fue remitido en noviembre de 2024 a la Dirección General de Aviación Civil (DGAC), y dos meses más tarde se encontraba en fase de estudio. AESA aún no ha precisado, ante la consulta de La Voz de Ibiza, cuál es el estado actual del proyecto.
Si bien la limitación normativa es para toda España, Jiménez ha dicho que, ante la falta de una normativa estatal, “hay otros marcos de actuación” que evalúan con administraciones autonómicas de la península.
Pruebas
El ensayo de hidroaviones se realizó en noviembre de 2024. Un avión llegó desde Palma hasta la Marina IGY. Tenía previsto realizar tres vuelos con pasajeros partiendo desde Ibiza, pero apenas realizó uno, y sin pasajeros a bordo. El viento de levante, señalaron, obligó a tener esa precaución.
La empresa consideró que las pruebas fueron satisfactorias, aunque admitió que debería buscar otro lugar desde el cual operar en Ibiza (el cual necesitaría la autorización de la APB).
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El viento de levante, el punto negro de las prueba del hidroavión en Ibiza
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La compañía se proponía, según anunciaba el año pasado, unir las distintas islas de una manera rápida y ágil, sin la necesidad de desplazamientos al aeropuerto y largos embarques.
El proyecto original comenzó en 2018 y demandó una inversión de 7 millones de euros en equipamiento y pruebas. “Estas pruebas han demandado una importante inversión. Y la APB no nos ha contestado para revisar los resultados”, se ha quejado Jiménez.
