Formentera ha enfrentado una difícil situación tras más de cuatro días de huelga de basura, que ha dejado los contenedores rebalsados y las calles afectadas por la acumulación de residuos. Aunque el servicio de recogida se restableció parcialmente en las primeras horas del domingo, la isla aún se enfrenta a los efectos de la crisis.
El sindicato UGT Servicios Públicos ha criticado la gestión de la situación, denunciando la imposición de servicios mínimos desproporcionados y acciones ilegales por parte de las autoridades locales.
Ante la falta de respuesta del presidente del Consell a su propuesta de mediación, UGT ha anunciado medidas legales para abordar el conflicto.
En este contexto, el presidente del Consell, Llorenç Córdoba, ha ofrecido su participación en un proceso de negociación transparente para resolver el conflicto laboral entre la empresa concesionaria del servicio de recogida de basuras y los trabajadores.
Córdoba ha destacado la urgencia de encontrar una solución satisfactoria para todas las partes involucradas y evitar una huelga indefinida a partir de junio