El Partido Popular y el Partido Socialista han llegado a un acuerdo casi total para aprobar la nueva ley de restricción de vehículos en Ibiza, que será sometida a votación en el Parlament balear este martes, 29 de octubre.
El PSOE votará a favor del texto, según confirma la diputada autonómica Pilar Costa, a pesar de que una de las enmiendas del PSOE que buscaba excluir de las restricciones a los casos excepcionales de residentes de hecho en Ibiza pero empadronados y con trabajo en Formentera.
La enmienda rechazada y las implicaciones para Formentera
La enmienda 10797 del PSOE tenía como objetivo excluir de las restricciones a los vehículos de personas que viven en Ibiza pero están empadronadas y trabajan en Formentera pero que «puedan acreditar que su domicilio familiar efectivo está en Ibiza».
Esta propuesta surgió como respuesta directa a las alegaciones presentadas por el Consell Insular de Formentera, que destacaban la necesidad de reconocer la especial interconexión entre ambas islas.
En su documento, Formentera alertaba sobre el impacto negativo que podría tener una regulación rígida en la movilidad entre las islas, especialmente para los residentes y trabajadores que dependen de este vínculo diario.
El texto de la enmienda del PSOE proponía que, «en virtud de la particular relación profesional, familiar y comercial entre las islas, los vehículos de personas empadronadas en Formentera, con trabajo profesional en Formentera pero que puedan acreditar que su domicilio familiar efectivo está en Ibiza quedaran exentos de las limitaciones generales de la ley».
El PP había planteado una transacción que modificaba esta enmienda para ampliarla a todos los vehículos de personas empadronadas en Formentera.
Según ha explicado el diputado popular Jacobo Varela, el grupo parlamentario ha decidido que no defenderá la transacción que también afectaba a los residentes en Ibiza para circular en Formentera. «En reciprocidad, se excluyan de la limitación general del artículo 3.1 de la Llei 7/2019 los vehículos de los que sean titulares personas empadronadas en Ibiza».
La enmienda que sí se integrará
La enmienda que sí será aprobada es la 10833, que establece: «El Consell de Ibiza, en coordinación con los cinco ayuntamientos de la isla, promoverá la movilidad sostenible potenciando un modelo de transporte público, colectivo e intermodal, que reduzca el uso del vehículo privado y promueva otras formas de transporte sostenible, sin emisiones de gases de efecto invernadero».
Este acuerdo destaca la transformación de la red de transporte público y la creación de infraestructura para bicicletas, como parte de un compromiso por reducir el impacto ambiental y avanzar hacia la descarbonización.
En la enmienda se detalla que «se priorizarán actuaciones dirigidas al transporte público, la red de carriles bici, la protección de los usuarios vulnerables en la red viaria y la descarbonización».
Además, se menciona la necesidad de desplegar una «red de puntos de carga eléctrica para vehículos» y promover «planes de movilidad sostenible en zonas laborales y turísticas», que deberán elaborarse en un plazo máximo de dos años.
Unides Podemos quiere ampliar el alcance de la normativa
Más allá del acuerdo entre el PP y el PSOE, Unides Podemos insiste en que la regulación de la movilidad no se limite a Ibiza. Plantean que el Consell de Mallorca pueda establecer cupos anuales o bienales para limitar el ingreso de vehículos y priorizar los de cero emisiones.
Además, sugieren reforzar la movilidad no motorizada y el transporte público en todas las islas, proponiendo una armonización de las normativas para enfrentar los retos ambientales comunes en el archipiélago.
Expectativas para el pleno del 29 de octubre
Se espera que el debate avance hacia la aprobación de la normativa. El Consell de Ibiza asumirá la gestión inicial de las restricciones hasta que se constituya el Consorcio de Movilidad, entidad encargada de coordinar las sanciones y gestionar la normativa a largo plazo.