TEMPORAL

Regreso a clases en Can Misses: alumnos vuelven mientras continúan las obras por filtraciones y goteras

La Conselleria de Educación espera resolver por completo el problema de filtraciones en tres semanas, pero las familias expresan desconfianza por un muro del patio que cayó por la lluvia y no ha sido arreglado.

Vista de la escuela Can Misses con obras y cercas de seguridad
Obras en el CEIP Can Misses.

Los alumnos de la escuela de Can Misses han podido volver a las clases este lunes, seis días después de las fuertes lluvias que azotaron Ibiza el pasado martes. Los estudiantes habían permanecido en casa desde el día siguiente de las inundaciones debido a los desperfectos que la tempestad ocasionó en el centro escolar.

Si bien el regreso marca un paso hacia la normalidad, las tareas de reparación aún no han finalizado.

Filtraciones y zonas restringidas

Actualmente, se sigue trabajando en la escuela para arreglar filtraciones que, según las autoridades del centro, no afectan a las aulas. En la escuela aseguran que los niños no pueden acceder a las zonas afectadas, y que los desperfectos no repercuten en la seguridad de las clases, según han destaco a IB3.

Los daños implican la necesidad de arreglar «un par de cosas del techo, de goteras», que provocan infiltraciones que podrían ser perjudiciales para la infraestructura general. Se ha especificado que las zonas afectadas son más bien pasillos y un área de baños que se encuentra cerrada. En las aulas no existe ningún tipo de peligro.

Para facilitar estas labores, se han tenido que cerrar algunas puertas de acceso a los niños, reservándolas para el paso de los trabajadores que aún arreglan los desperfectos.

La Conselleria de Educación ha asegurado que el problema de las filtraciones se acabará de resolver por completo en tres semanas.

Inquietud por el muro caído

A pesar de la reapertura, algunas familias expresan preocupación. El motivo de su desconfianza es un muro del patio que cayó con las lluvias y todavía no ha sido arreglado. Aunque una madre afirmó que si el centro está abierto es porque hay seguridad, reconoció que «100% tranquila no estoy».

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La noticia de no poder asistir a clases inicialmente fue recibida por los niños con «cierta alegría». Sin embargo, la situación ha generado complicaciones logísticas para las familias, quienes tuvieron que organizarse. En el caso de los trabajadores autónomos, esta situación ha generado un impacto económico, pues un padre explicó que, como suele pasar, su trabajo se ve mermado.

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