Una inusual alerta sorprendió a los navegantes en el canal entre Ibiza y Formentera cuando varias embarcaciones informaron sobre la presencia de una vaca en descomposición a la deriva. Ante el potencial peligro para la navegación, las autoridades marítimas tomaron acción inmediata.
La CCS Palma coordinó la movilización de Salvamar Acrux, una embarcación de rescate, que se dirigió rápidamente al lugar del incidente.
Tras llegar al punto indicado, el equipo de Salvamar logró asegurar la vaca y procedió a remolcarla hasta el puerto de Ibiza.
Una vez en el puerto, la Autoridad Portuaria asumió la responsabilidad de recoger y gestionar adecuadamente el desecho animal.
La rápida respuesta y coordinación entre las autoridades marítimas permitió evitar posibles riesgos para la navegación y garantizar la seguridad en la zona.