La ruptura de los gobiernos autonómicos de PP y Vox es celebrada por el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, quien solicita al líder nacional de los populares Alberto Núñez Feijóo, la derogación de las «contrarreformas» aprobadas durante este año y la ruptura de los pactos con la formación de Santiago Abascal en los ayuntamientos.
En Ibiza, Vox está en la oposición en el Consell y los ayuntamientos de Vila, Sant Josep, Santa Eulària y Sant Antoni.
Finalizada la cumbre de la OTAN, desde Washington, durante una conferencia de prensa, Sánchez ha manifestado que los partidos de izquierda ejercerán una oposición «positiva» en las autonomías en las que Vox ha salido del gobierno (Castilla y León, Aragón, Comunidad Valenciana, Extremadura y Murcia) y ha roto el acuerdo parlamentario como en Baleares, condicionando su respaldo a los ejecutivos autonómicos del Partido Popular a las medidas propuestas en cada región.
Ha declarado que en cualquier caso es «una jornada extraordinaria para España» y que, tras la separación de las administraciones de PP y Vox, se ha logrado «una nación superior», por lo que ha indicado que no puede esconder su «júbilo y contento».
Advierte en este sentido que en los próximos días habrá bastante «politiquería» para analizar a quién favorece o perjudica dicha nueva coyuntura, aunque ha indicado que «la mayoría de la población española es la principal favorecida por el retiro de la extrema derecha de los ejecutivos regionales».
Ley de Extranjería
A pesar de ello, Sánchez ha subrayado que esta elección corresponde a Vox, por lo que insta al PP a distanciarse de las medidas acordadas con los seguidores de Abascal hasta el presente.
En primer término requiere que acepte la modificación de la Normativa de Inmigración para que la distribución de menores migrantes entre las regiones sea obligada.
De acuerdo con lo indicado, sería «la prueba definitiva» de que el PP «ha cortado relaciones con las políticas de Vox», ya que esta situación surge a raíz del rechazo de esta agrupación a aceptar la distribución de menores migrantes.
Queda demostrado por el presidente que la estrategia de «gobernar con la ultraderecha ha fracasado» y reafirma que constituye una excelente noticia para los españoles. Se menciona que estos gobiernos han adoptado políticas «ultraderechistas» en ámbitos como violencia de género, memoria democrática, servicios sociales y calidad de servicios públicos, transición ecológica y también sobre cambio climático.
