El PSOE de Formentera ha mantenido este domingo su postura contraria a apoyar una moción de censura de Sa Unió para desbancar a Córdoba después de haberse reunido el sábado para tratar esta cuestión.
El secretario general de la formación, Rafael Ramírez, ha interpretado la filtración de fragmentos de las conversaciones de Llorenç Córdoba con José Manuel Alcaraz y con los ocho consellers de Sa Unió, cuyo contenido «era conocido», como una «presión» para que la oposición se sume a la moción de censura. «Es muy triste y sórdido», ha sentenciado.
Antes de llegar a este punto, Ramírez ha recomendado a Sa Unió que «explore previamente todas las opciones que tiene» antes de buscar una moción de censura, instrumento que, ha recordado, «está pensado para la oposición» no «para que un gobierno expulse a su presidente».
Ramírez ha lamentado ver «con tristeza para la ciudadanía» que «un equipo de gobierno con mayoría absoluta no trabaja para los intereses públicos, sino para otras cosas, en reuniones eternas para hablar de dinero, de fondos reservados» lo que es «algo deleznable». «Es un caos y un desastre», ha concluido.
Ha solicitado transparencia y explicaciones. «Sospechamos que hay muchas más cosas por detrás que no sabemos y creemos que hay mucha gente que ha de explicaciones como (Marga) Prohens, Toni Costa, Alcaraz y Córdoba».
Córdoba no ha dado muestras de querer dimitir y Alejandra Ferrer, tampoco ha mostrado excesivo entusiasmo a apoyar una moción de censura de Sa Unió.
