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POLÉMICA

Luis Rubiales pierde su demanda contra Wikipedia

Más allá de su declive por su acoso a Jenni Hermoso, Rubiales invirtió millones de euros de la Real Federación Española de Fútbol en demandar a periodistas, medios y también a Wikipedia, con malos resultados
Luis Rubiales
Luis Rubiales en 2018. (Foto: Ministerio de la Presidencia de España en Wikicommons)

El año pasado, Luis Rubiales, además del repudio por su beso a Jennifer Hermoso (y la posterior denuncia de la futbolista por acoso sexual, coacciones y agresión sexual), demandó a Wikipedia.

El expresidente de la Real Federación Española de Fútbol (RFEF) usó fondos de esta asociación para intentar obligar a la web a cambiar contenido que tenía publicado. Según ha detallado Alejandro Requeijo en El Confidencial, hay una demanda de enero de 2023, en la que Rubiales pide a un despacho de abogados la defensa de todas las causas penales en las que estuviera inmersa la Federación. Así, los letrados fueron contra periodistas y medios de comunicación, además de contra Wikipedia, y la Federación invirtió en ello al menos 4,2 millones de euros.

«La RFEF mantuvo su demanda contra la Fundación Wikimedia a pesar de haber perdido una demanda similar en febrero de 2023 contra El Confidencial, el medio que publicó originalmente los ‘Supercopa Files'», declararon voceros de Wikipedia al mismo medio.

Como reporta Requeijo, finalmente, Wikipedia aguantó y ganó el proceso legal, aunque sus voceros también señalaron que lamentan los fondos invertidos en defenderse, que han sido considerables.

El caso Luis Rubiales-Jenni Hermoso

Durante los festejos por  Copa Mundial Femenina de Fútbol, celebrada en Australia en agosto de 2023, Rubiales besó a la futbolista española Jennifer Hermoso sin su consentimiento.

El gesto desencadenó una serie de consecuencias inagotables y un profundo debate en España sobre consentimiento sexual, sexismo y abuso de poder. Ministros, futbolistas y gran parte de la sociedad exigieron la dimisión de Rubiales, quien se defendió argumentando que el beso fue consensuado.

Hermoso negó categóricamente dicho consentimiento y declaró que se ha sentido “vulnerable y víctima de una agresión”.

La situación trascendió las fronteras de España, y hasta la Organización de Naciones Unidas se pronunció condenando el incidente.

 

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