La esperada Ley Antitabaco será discutida este martes en el Consejo de Ministros, tras haberse pospuesto durante el verano. El Ministerio de Sanidad, que inicialmente esperaba su aprobación en julio, retoma así una de las grandes apuestas normativas de la legislatura en materia de salud pública. El secretario de Estado de Sanidad, Javier Padilla, ya había adelantado que se trabajaba contra reloj antes del parón estival para que la norma llegara a tiempo, algo que finalmente no ocurrió.
Prohibición de fumar en terrazas
Uno de los cambios más destacados de la Ley Antitabaco es la prohibición de fumar en las terrazas de bares y restaurantes en todo el territorio nacional. Esta medida, aplicada previamente en algunas comunidades autónomas, ahora se extenderá de manera general. Mientras que las asociaciones médicas y de pacientes han celebrado esta decisión, representantes del sector hostelero han mostrado preocupación por el posible impacto económico en un contexto de recuperación.
Playas y espacios naturales libres de humo
Otro de los puntos centrales es la ampliación de los espacios libres de humo a playas y entornos naturales. El objetivo es doble: proteger a la ciudadanía de la exposición al tabaco en lugares públicos y reducir el impacto ambiental de las colillas. Con esta disposición, la ley conecta la salud pública con la sostenibilidad y el cuidado del medioambiente.
Regulación de cigarrillos electrónicos
La normativa también endurece las condiciones de uso de los cigarrillos electrónicos y productos relacionados. Su popularidad, especialmente entre los jóvenes, ha llevado a Sanidad a aplicar restricciones similares a las del tabaco convencional. La intención es frenar la normalización de estos dispositivos y evitar un aumento en la dependencia a la nicotina entre nuevas generaciones.
Un debate entre salud y economía
Las medidas de la nueva Ley Antitabaco han generado un intenso debate social y político. Mientras que los colectivos sanitarios las consideran un avance en protección de la salud, los empresarios de la hostelería critican su aplicación por el impacto económico que podría tener. El Gobierno, sin embargo, insiste en que la prioridad debe ser la prevención sanitaria frente a la actividad económica.
El siguiente paso: el Congreso
De aprobarse en el Consejo de Ministros, la norma pasará a la tramitación parlamentaria. Allí, los distintos grupos políticos podrán debatir y enmendar el texto, lo que marcará el alcance final de una ley que busca redefinir la relación de la sociedad española con el tabaco en todas sus formas.
El empaquetado genérico, fuera de la norma inicial
Un punto que se ha quedado fuera de la propuesta inicial es la implantación del empaquetado genérico. Según fuentes del Ministerio de Sanidad, la decisión responde a la falta de consenso dentro del propio Gobierno. No obstante, la ministra Mónica García mantiene la intención de recuperar esta medida durante el debate parlamentario. Para que prospere, necesitará del respaldo de otros grupos que garanticen su aprobación.
Una ley con amplio impacto
La llegada de la nueva Ley Antitabaco al Consejo de Ministros supone un hito en la política sanitaria del país. Con la prohibición de fumar en terrazas, la ampliación de espacios libres de humo y la regulación de cigarrillos electrónicos, la norma pretende dar un paso decisivo en la protección de la salud pública. Ahora, la clave estará en el debate político y social que determinará el alcance definitivo de esta reforma.