La Audiencia Provincial de Baleares ha fijado para el 26 de febrero de 2029 el juicio oral sobre la presunta agresión sexual a una menor de 14 años ocurrida en agosto de 2017. Así lo revela El Confidencial, tras acceder al auto.
De esta forma, la menor —que entonces tenía 14 años— tendrá que esperar al menos doce años para que el proceso judicial llegue a sentencia.
Qué ha ocurrido
Según explica El Confidencial, la joven sufrió la supuesta agresión por parte del patrón del barco con el que navegaba junto a sus padres y hermanos, en aguas de Menorca. El acusado, I.S.P., era un amigo de la familia y aprovechó la confianza para llevar a cabo el ataque.
La denuncia se interpuso horas después del suceso. Sin embargo, la instrucción ha durado casi ocho años, y ahora el juicio se ha señalado con cuatro años y medio de retraso.
El abogado de la víctima, Jordi Ribas, recibió la notificación con incredulidad el pasado verano, pensando que podría tratarse de un error numérico, pero la Audiencia Provincial confirmó que la fecha es correcta.
Llueve sobre mojado en esta causa. No en vano, el escrito del fiscal ya reconoce la existencia de dilaciones indebidas, según la citada fuente. El letrado lamenta que “esta dilación permitirá que —en caso de condena— el acusado pueda eludir el ingreso en prisión a pesar de la gravedad de los hechos”.
Contexto del problema del retraso judicial en Baleares
El caso no es aislado. Según la memoria del Consejo General del Poder Judicial (CGPJ), la jurisdicción penal de la Audiencia de Baleares tardó, en 2024, de media unos 26,2 meses en causas graves (sumarios) —cuando la media nacional es unos diez meses menos.
Además, según un artículo publicado por Ultima Hora el 1 de noviembre de 2025, una de las secciones penales de la Audiencia que más retrasos acumula ha decidido dedicar su actividad únicamente a la celebración de juicios, paralizando la tramitación de casi todos los recursos.
Y según otro informe, los juzgados de lo contencioso en Baleares ya han señalado causas para 2026, lo que evidencia el efecto estructural del atasco.
El presidente de la Audiencia ha admitido que la situación es “muy grave” y advirtió de que sin más medios humanos y materiales el problema seguirá agravándose.
Sin ir más lejos, el caso puertos, uno de los casos más mediáticos de los últimos tiempos en Baleares, aún carece de fecha para la celebración del juicio oral.
Colapso judicial
El caso de “Laura” y el juicio señalado para 2029 se ha convertido en un símbolo del colapso judicial en Baleares. La Audiencia Provincial señala el juicio de una agresión sexual grave ocho años después de los hechos y con cuatro de espera más para la vista. Este escenario evidencia que el sistema acumula retrasos que no sólo afectan la eficiencia, sino la propia garantía de justicia.
