“Hemos llegado a un punto en el que la pérdida de confianza en el señor Llorenç Córdoba es ya total y la situación insostenible”. Así ha justificado Óscar Portas, quien sucederá a Córdoba, la moción de censura para desbancar al hasta hoy presidente del Consell.
Portas, el candidato acordado por los grupos políticos de GxF, PSOE y Sa Unió, ha señalado que “no es un día fácil”. “Nos hemos obligado a estar aquí por la responsabilidad y por el compromiso con el futuro de nuestra isla. Los vecinos de Formentera observan con preocupación la evolución de los eventos”, ha destacado en alusión a la crisis política que vive desde hace más de un año la menor de las Pitiusas.
Duras críticas
Portas no ha escatimado en críticas contra Córdoba. “Esta administración, que debe ser la casa de todos, se ha visto gestionada según los caprichos personales de su máximo responsable, que ha ignorado los consensos, las recomendaciones de los técnicos y, además, la opinión de los consejeros que le han dado apoyo en el momento de su investidura”, ha señalado. Y ha destacado como “punto de inflexión que ejemplifica esta pérdida de confianza […] la controvertida adjudicación del concurso de explotación de las autorizaciones y concesiones de las playas de Formentera”. Según el exconseller de Cultura y Patrimonio, Córdoba “ignoró las recomendaciones de los técnicos del Consell y actuó de manera unilateral y contraria a los principios de transparencia y buen gobierno que debe regir cualquier institución democrática”.
“Así es como todos los trabajadores de Litoral llegaron a solicitar un cambio de área de trabajo, incapaces de continuar bajo la dirección de quien debería ser su principal defensor y aliado”, ha añadido.
Para Portas, “esta situación se ha visto agravada por una crisis institucional que se explotó hace mucho tiempo como resultado directo de las acciones del presidente y la consejería se ha convertido en una dinámica de parálisis y desconfianza que no podemos permitir que continúe”.
“Tenemos que hacer autocrítica”
Aunque no ha ahondado en ello, Portas ha insinuado que Sa Unió debe hacer autocrítica: “Quiero ser claro, no estamos aquí para obviar nuestra parte de responsabilidad. Como miembros de esta administración, todos tenemos que hacer autocrítica. Y los miembros de Sa Unió somos los primeros”.
En esa línea, Portas ha dicho: “Es evidente que no hemos sido capaces de evitar esta situación antes del punto en el que nos encontramos hoy. Aceptamos nuestros errores, pero también afirmamos con contundencia que hemos trabajado para reconducir esta administración”. De todos modos, ha enfatizado que “las acciones unilaterales del presidente han impedido que este esfuerzo colectivo tenga los resultados que Formentera necesita”.
Una nueva etapa
A su vez, Portas ha agradecido “a las fuerzas de izquierda que hayan hecho posible este paso adelante”.
“Esta moción de censura no es un acto contra una persona, sino un acto de responsabilidad para toda la ciudadanía. Es un gesto de compromiso para arreglar el camino de esta administración y volver la confianza a una institución que nunca habría perdido el respeto de su gente a quien le sirve”, ha señalado. Y ha concluido: “Hoy abrimos una nueva etapa. Somos conscientes de los retos que enfrenta Formentera y estamos comprometidos a abordarlos con determinación, transparencia y diálogo. Gracias a todos los que han hecho posible este paso adelante”.
