Después de que el caso de Carlos Pavez —vecino de Sant Antoni que ha denunciado públicamente y por vía administrativa a un taller de Ses Païsses— se hiciera público, desde el propio taller ofrecieron su versión a La Voz de Ibiza.
Durante el diálogo, los mecánicos que hablaron (uno como dueño y otro en nombre del responsable del establecimiento) relataron cómo se produjo el ingreso del vehículo, qué tipo de avería presentaba, cómo se abordó la reparación y qué sucedió después. También explicaron qué propuestas ofrecieron al cliente y cómo, según ellos, la comunicación se rompió por iniciativa del propio denunciante.
El ingreso del vehículo y la primera avería
Según explicaron desde el taller, el coche fue trasladado hasta sus instalaciones mediante una grúa. En el momento de su llegada, el vehículo no arrancaba, por lo que —según indican— no era posible establecer con exactitud la causa del problema sin desmontar parte del motor. Aseguran que en ese momento se comunicó al cliente que el diagnóstico requería abrir el bloque del motor y que se trataba de un presupuesto abierto, condicionado a lo que se encontrara.
Una vez desmontado, afirman que se detectó un problema mecánico importante en el motor. Según su relato, esa reparación fue explicada al cliente, quien habría aceptado la intervención de forma verbal. El taller sostiene que se procedió a reparar el bloque motor, se sustituyeron las piezas necesarias y el coche volvió a arrancar con normalidad tras la intervención.
Aparición de un nuevo problema
Según relataron los trabajadores del taller, fue al finalizar esa primera reparación cuando se detectó un nuevo fallo: el vehículo no podía engranar la marcha atrás. Los mecánicos afirmaron que este problema no estaba presente en el diagnóstico inicial y que la caja de cambios no había sido manipulada durante la intervención anterior.
Desde el taller señalan que se trataba de una avería distinta, no prevista, y que se manifestó una vez que el coche volvió a ponerse en marcha. En ese momento, indicaron, se ofreció al cliente una solución para ese nuevo problema, que incluía varias alternativas.
Retiro del coche sin saldar la factura
El taller sostiene que el cliente retiró el vehículo sin pagar la factura correspondiente a la reparación del motor. Según explicaron, la llave del coche seguía en el taller, pero el denunciante habría utilizado otra copia para llevarse el vehículo sin previo aviso.
Relataron que, al descubrir que el coche ya no estaba en el lugar, los responsables del taller se sorprendieron y entendieron que el cliente había decidido no continuar la conversación.
Las opciones ofrecidas al cliente
Los mecánicos que hablaron con este medio explicaron que el jefe del taller ofrece reparar la caja de cambios sin coste adicional para el cliente. También indicaron que se contempló instalar una pieza nueva, reutilizar la misma si era viable o, incluso, cubrir el coste de la reparación en otro taller si así lo prefería el propietario del coche.
Según esta versión, ninguna de esas propuestas fue aceptada. Aseguran que, tras presentar esas opciones, el cliente dejó de responder y no volvió a presentarse en el local para tratar el asunto personalmente. “Se negó a hablar”, resumieron durante la conversación.
Impacto del conflicto y contexto
Durante la llamada, los mecánicos que atendieron a La Voz de Ibiza explicaron que el taller sigue funcionando con normalidad y que la situación con este cliente ha tenido repercusión en redes sociales, pero que no ha derivado en reclamaciones similares por parte de otros usuarios. En ningún momento hablaron de denuncias anteriores o conflictos con otros clientes.
La conversación se centró en exponer su versión de los hechos y en dejar constancia de que, según su relato, hubo disposición para resolver el conflicto desde el primer momento, pero que no fue posible concretar ningún acuerdo porque —según ellos— el cliente no quiso continuar el diálogo.
Una oferta que, según el taller, sigue en pie
Al cierre de la conversación, los responsables del negocio reiteraron que siguen dispuestos a asumir el coste del arreglo de la caja de cambios si el cliente lo desea. Indicaron que podrían realizar la reparación ellos mismos o cubrir los gastos en otro establecimiento mecánico, y que esa opción no ha sido retirada.
La propuesta, según relataron, no ha sido aceptada ni rechazada formalmente. Simplemente, afirman, no hubo respuesta. En ese sentido, aseguran que la disposición a cerrar el conflicto de forma práctica y directa sigue vigente.
Sin resolución
Por ahora, el caso continúa sin acuerdo entre las partes. La denuncia pública ya fue presentada ante el Ayuntamiento de Sant Antoni, y el relato del cliente fue ampliamente difundido en redes sociales. Desde el taller no niegan la existencia del conflicto, pero insisten en que hicieron lo posible por evitarlo.
Esta es, al menos, la versión que ofrecieron los mecánicos en nombre del responsable del establecimiento, tal como fue relatada a La Voz de Ibiza en una conversación directa mantenida tras conocerse públicamente la denuncia.