El grupo turístico NCalma cuyo buque insignia es el hotel de cinco estrellas Aguas de Ibiza de Santa Eulària no para. Después de abrir Nativo, en Siesta, en 2021, trabaja en la apertura de dos nuevos establecimientos de cinco estrellas.
Tal como avanzó La Voz de Ibiza, está pendiente de la licencia de obras para empezar la remodelación de un edificio en el centro de Santa Eulària para convertirlo en un hotel boutique de cinco estrellas conformado por 30 apartamentos de entre 40 y 50 metros cuadrados cuya fecha de apertura es a día de hoy todavía una incógnita. Se llamará Herencia.
Antes, a principios de la próxima temporada, estima abrir el reformado y ampliado el Racó des Sol en la bahía de Portmany que se convertirá en el tercer cinco estrellas del municipio de Sant Antroni, tras las aperturas del Oku y TRS Ibiza y al que se sumarán las reformas adelantadas por La Voz de Ibiza del Only You en el Palmyra y del Stella Maris.
El grupo espera que la paralización de los trabajos de drenaje de la parcela no retrase la fecha de apertura del futuro establecimiento. La semana pasada Costas comunicó que ya tiene lista la autorización que espera recibir oficialmente esta semana.
Además, Torres y su equipo trabajan en estos momentos en las obras y comercialización de dos promociones de viviendas destinadas al turismo residencial, una en Cala Tarida y otra en Santa Eulària, al mismo tiempo que el grupo tiene la vista puesta en el inicio de otras dos nuevas promociones.
Asimismo, tiene en el radar la expansión fuera de Ibiza del concepto Nativo, con dos localizaciones de costa, una en Baleares y otra en Málaga en estudio.
Al frente del grupo empresarial está la segunda generación. Alberto Torres Gutiérrez (Ibiza, 1981), hijo del fundador, ingeniero informático de profesión, es el CEO del NCalma Homes y NCalma Hotels, el Grupo NCalma, la compañía familiar fundada por su padre, Alberto Torres y su madre Mari Carmen Gutiérrez, conocida por ser también la presidenta de la asociación contra el cáncer Elena Torres, en honor a su hija fallecida como consecuencia de la enfermedad.
Torres destaca el papel de su esposa, Ana Marí Planells, socia de la compañía y codirectora general, con la que lleva 12 años casado, en el proyecto. «Somos un equipo», insiste.
Torres demuestra ser un enamorado de su profesión. No para de repetir a lo largo de esta entrevista que “somos hoteleros” y que “nos gusta apostar por el turismo de calidad para Ibiza”.
Ser hotelero era el sueño de su padre, un hombre que responde al paradigma del empresario hecho a sí mismo que empieza de cero. Concretamente, de camarero en una cafetería. Junto a un socio, fundó Servitur, una compañía de gestión de apartamentos turísticos de cuya escisión se quedó con lo que hoy es Nativo.
El punto de inflexión fue la inauguración del hotel Aguas de Ibiza, del que, además, fueron los constructores. El hotel vio la luz gracias a las plusvalías obtenidas de una promoción de suelo.
El grupo cuenta hoy con 120 empleados fijos. La división hotelera factura 25 millones de euros y generó un beneficio de entre 7 y 8 millones de euros en 2023.
Torres se refiere al hotel Aguas de Ibiza como “un proyecto de vida”, “un sueño”, “un hijo que va creciendo”… “Al principio iba a ser un hotel de cuatro estrellas. Finalmente vimos que había un hueco en el mercado para un cinco estrellas y nos arriesgamos. Lo empezamos a pensar en 2002 y lo abrimos en 2008. No tiene nada que ver la realidad de la isla de ahora a la de entonces cuando era una utopía abrir un cinco estrellas en Santa Eulària. Era arriesgado y además abrimos en plena crisis. Fue una gran escuela”, rememora en esta entrevista con La Voz de Ibiza.
-Después de 15 años, ¿qué valoración hace de la evolución del hotel Aguas de Ibiza y de la isla?
-Todos los ibicencos nos tendríamos que hacer: ¿Qué modelo de isla queremos? Las cosas han cambiado mucho desde entonces, la isla ha evolucionado mucho y el cambio de modelo ha traído cosas muy positivas y otras no tanto. Todo cambio implica consecuencias.
No es lógico que no haya nadie en esta isla que no se queje de la falta de personal y de la falta de vivienda. Esto no es solo un problema para los hoteles. Es un problema de toda la sociedad.
En general, estamos contentos porque las temporadas son buenas, no sé si mejores que hace 40 años porque no lo viví. Ibiza tiene muchas fortalezas, es una marca mundial y muchos clientes que quieren venir. El reto que tenemos por delante es hacerlo bien para nuestros clientes, nuestros trabajadores y nuestros residentes.
-Entremos en detalle. ¿Ha mejorado la rentabilidad del hotel desde que abrieron, descontando el lógico proceso de maduración de un nuevo establecimiento?
-Tenemos la suerte de que nuestros productos son rentables. El problema que tenemos es que aquí hemos de amortizar en seis o siete meses la misma inversión que en otros sitios hacen en 12. Reducir la temporalidad es un gran reto.
-Si siguen invirtiendo aquí es porque debe de ser rentable…
-Somos ibicencos y no tenemos grandes aspiraciones. Nos gusta invertir aquí porque somos de aquí. Somos una empresa pequeña.
-¿La falta de vivienda y de falta de personal es consecuencia directa del cambio de modelo?
-No sé… Los grandes problemas no solo tienen una causa sino la suma de varios factores. Hay más turistas porque se ha reducido la estancia media y hay más turistas viniendo menos tiempo; hay más oferta ilegal, mucha oferta ilegal, por lo que la oferta de camas ha crecido y son camas que salen del mercado residencial; los hoteles que antes se operaban con 40 personas ahora necesitan más de 100; hay más oferta complementaria que afortunadamente también ha incrementado la calidad y donde antes había cinco personas en un chiringuito ahora hay 20; hay más gente que vive todo el año porque las temporadas son más largas, luego la población ha crecido… Todo ello tensiona el mercado de la vivienda.
-En calidad de su doble condición de hotelero y promotor, ¿es capaz de aportar alguna solución?
-Las soluciones a grandes problemas que vienen de múltiples factores también requieren de múltiples soluciones. No hay una única solución, han de ser muchas. Una debe ser controlar la oferta ilegal que tenemos, que se cumpla el planeamiento. Y otra dar más flexibilidad para favorecer modelos de vivienda a cada necesidad manteniendo la calidad de vida, ya que como sociedad hemos de avanzar, no retroceder.
-No entiendo qué quiere decir con flexibilidad, me parece que no dice lo que piensa…
-Si montamos una propuesta para el personal que viene a hacer la temporada, también tendremos más oferta residencial para todo el año, ya que son viviendas que ahora están reservadas para este colectivo. Hay gente que viene cinco meses y que quiere seguir viniendo solo cinco meses porque tiene la vida montada así. Tenemos que adaptarnos como industria a sus necesidades.
-¿Se refiere a residencias para trabajadores?
-No me corresponde a mí decir lo que hemos de hacer. No obstante, tengo claro que hay que buscar fórmulas. No somos el único país que tiene este problema, aunque aquí es más grave porque un trabajador no puede vivir a 60 kilómetros e ir y venir todos los días del trabajo como sucede en la Península. Ante esta realidad los empresarios nos hemos visto obligados a buscar y gestionar alojamiento para los trabajadores.
Hemos de dar facilidades al sector para que tenga menos miedo de invertir y hacer alojamientos. Las administraciones públicas y el sector privado hemos de trabajar conjuntamente para que el problema se reduzca a través de múltiples soluciones. Granito a granito, hemos de ir solucionando el problema. No será en un año, pero es urgente que empecemos.
-¿Cómo lo hacen en su grupo?
-Como todos. Has de invertir en un departamento de Recursos Humanos muy potente, que se ha convertido en una de las ventajas competitivas del que lo tiene. Nosotros tenemos un hotel para los clientes y un servicio de alojamiento paralelo para el personal. Es atípico, pero hemos de gestionar el alojamiento del personal, que, no lo olvidemos, también, es vivienda de todo el año que sacamos del mercado.
-¿Tienen habitaciones para el personal en los hoteles?
-No. Antes se hacía y ahora ya no se hace. Es una arma menos de la que disponemos, pero gracias a Dios, la calidad de vida ha mejorado y no creo que tengamos que volver a lo que se hacía hace 50 años. Pero bien hecho, está claro que podría ser una solución.
A veces no tenemos en cuenta el drama que supone para los pequeños empresarios. Si eres grande, tienes más recursos, más poder de negociación y capacidad de gestión. Pero qué pasa con el empresario que tiene una cafetería y no encuentra camarero o cocinero. ¿Qué hace? ¿Alquila un piso? No puede. Y esto es un problema para todos porque no hay destino turístico sin oferta complementaria de comercio y hostelería. Que haya variedad de oferta es lo que le da gracia a un destino. Me preocupa porque hablamos mucho, pero abordamos poco.
-Volvamos a la flexibilidad que sigue sin quedarme claro. ¿Qué soluciones tiene en mente?
-Una vez más, no me corresponde a mí dar la solución porque no está en mi mano. Lo que quiero decir es que hay soluciones modulares desmontables muy válidas. Vale la pena estudiar si merece la pena establecer una clasificación del suelo específica para este tipo de soluciones como equipamiento, no sé si público o privado…
-El PP ha anunciado que incorporará al decreto de vivienda la posibilidad de construir residencias para trabajadores en suelo hotelero.
-No sé si tiene sentido en Ibiza porque el precio del suelo hotelero es muy caro y no creo que quede mucho suelo, pero me parece una buena idea.
-Para que haya más vivienda en el mercado hemos de construir más.
-No creo que tengamos que crecer más. Tanto el suelo urbano como el turístico que hay en los planeamientos municipales es suficiente. Lo que tenemos que hacer es aprovechar mejor lo que tenemos porque no podemos seguir creciendo ilimitadamente.
-Me sorprende que un promotor inmobiliario diga esto porque si no tiene suelo no puede hacer nuevas promociones.
-Nosotros somos hoteleros.
-Y promotores.
-En el momento que no haya suelo, no haremos promociones. Nosotros somos hoteleros, insisto.
-El nuevo presidente de las inmobiliarias de Pimeef, Ricardo Sánchez, dijo que era imprescindible construir más vivienda pública para alquilar a precio asequible. Mucha más.
-Me parece bien. Estamos analizando en estos momentos un proyecto de una nueva promoción y el 40% es vivienda de protección oficial.
De todas maneras, es un error pensar solo en términos de crecimiento. No solo hemos de pensar en crecer. Un promotor también puede mejorar productos existentes. Es lo que hicimos nosotros en Nativo. Era un apartahotel y lo hicimos un hotel de cuatro estrellas superior. El estigma del promotor que quiere suelo y crecer y crecer no es cierto. El promotor ha evolucionado mucho y es sensible a las necesidades sociales y medioambientales. Si hay margen de beneficio, reformar y rehabilitar es una buena política. Crecer indefinidamente sería un error.
-Su grupo apuesta por el turismo de lujo, tanto en los hoteles como en las promociones. ¿Es el camino para Ibiza?
-Ibiza tiene que tener oferta de todo tipo. Entiendo que la gente se queje del lujo, si desaparecen otras ofertas que históricamente hemos tenido porque ha de haber de todo. En Ibiza faltaba una oferta de lujo que ahora tenemos, pero necesitamos ser un mix. El problema es cuando no hay oferta para todo tipo de precios. Al igual que la vivienda, no toda puede ser de lujo. También ha de haber vivienda a precios asequibles.
-¿Atisba riesgo de que se rompa el equilibrio?
-Para eso está el mercado y una buena regulación pública. No veo riesgo, pero debemos ser más rápidos. Si tardamos mucho en resolver el tema de la vivienda, en el interín, se crean muchas ineficiencias, lo que supone un riesgo elevado de conflicto y problemas. Como sociedad vamos solucionado todos los problemas y hemos evolucionado mucho y bien. No podemos dejar a nadie atrás y eso significa que hemos de ser más rápidos.
-Me parece que llegamos tarde.
-Llegamos tarde. Es un hecho.
-¿Y la oferta turística corre el riesgo de perder el equilibrio?
-No. A veces perdemos la visión de lo que sucede en otros sitios. El mundo del turismo está en permanente evolución, no solo en Ibiza. Lo que pasa aquí pasa en muchos otros sitios. No somos el destino más de lujo ni el mejor, hay competidores que lo hacen mejor que nosotros. Es importante que tengamos claro lo que queremos ofrecer y trabajar para ser los mejores. No podemos ir cada uno por nuestro lado.
-¿Y lo tenemos claro?
-Creo que sí. Es importante que nuestros políticos lo hagan bien y estén a la altura. Hemos de ser más rápidos. Esto es lo que marca la diferencia.
-¿Qué papel ha de jugar el ocio?
-El ocio es muy positivo para Ibiza, pero no vale todo. Todos tenemos una responsabilidad como empresarios, sea de día o de noche, de que todo se tiene que hacer bien respetando las limitaciones y dando un servicio adecuado.
-¿Acaso no lo hace el sector del ocio?
-En España las leyes son muy completas y en general estamos trabajando bien, aunque siempre hay alguna fuga.
-Volvamos al Aguas de Ibiza. ¿Confían en que se haga la segunda fase del Palacio de Congresos?
-Estamos muy ilusionados. Santa Eulària está haciendo las cosas muy bien, los alcaldes lo han tenido claro y esperemos que empiece la segunda fase pronto. Es un proyecto muy ambicioso y muy bueno. Nosotros escogimos este solar porque ya era una realidad el Palacio de Congresos. Sería muy positivo para Ibiza que hubiera congresos todo el año porque desestacionalizar y tener actividad todo el año es muy positivo para toda la sociedad.
-De momento, no está garantizada la financiación del Govern para la segunda fase, tal como avanzó La Voz de Ibiza.
-Esperemos que se haga. No luchar por proyectos como este sería un error.
-He visto que abren el 27 de marzo. ¿Se plantean abrir todo el año?
-Hace años llegamos a abrir diez meses, pero los números no salieron. Ahora hemos vuelto a hablar de volver a abrir más meses, quizá no todo el año pero sí diez meses. Es muy positivo que haya hoteles de ciudad y numerosos agroturismos abiertos todo el año. Herencia, el hotel boutique que proyectamos, abrirá todo el año.
-¿Qué valoración hace del Hotel Nativo, el hotel de cuatro estrellas superior de Siesta que abrieron en 2021?
-Estamos muy contentos. El primer año abrimos cuatro meses a causa del covid y 2022 fue el año de la explosión, no de la recuperación. Está enfocado a un cliente más joven al que queremos trasladar, de alguna manera, la experiencia de un nativo. Es un hotel más divertido, nuestro lema es el lujo descalzo, la Ibiza más bohemia, más tranquila.
-De la Ibiza más tranquila, a la más movida, ya que trabajan contrarreloj para abrir el nuevo hotel Racó des Sol en la bahía de Sant Antoni, en las proximidades del OBeach.
-Nos gustan todas las Ibizas.
-¿Cómo se llamará el hotel?
-No tenemos el nombre decidido todavía.
-¿Tienen socios?
-No tenemos socios. El hotel es de nuestra propiedad y las obras las acometemos con financiación bancaria clásica de toda la vida.
-¿Cuál es la inversión?
-32 millones de euros. Es mucho dinero y mucho riesgo. Confiamos que saldrá bien.
-He visto que cuentan con una subvención de 4,3 millones de euros de los fondos europeos para un proyecto de cuatro estrellas.
-El proyecto era hacer un hotel de cuatro estrellas superior, pero trabajamos en la idea de que sea un cinco estrellas. No hay que volverse locos con las estrellas, lo importante es el precio y el servicio, hay hoteles de cuatro estrellas más caros que otros de cinco, y el servicio. A nosotros nos gusta el turismo de calidad y es lo que intentamos hacer.
Hemos accedido a fondos Feder porque Sant Antoni es considerada una zona madura. El proyecto encajó en el programa y nos hemos comprometido a pasar de 16 trabajadores fijos todo el año de media a 76 trabajadores.
-¿Abrirá todo el año?
-No, todavía no. Nos encantaría y trabajamos para ello. El número de trabajadores se refiere a la media de trabajadores anuales, pero generamos empleo estable con personal de mantenimiento, administración y comercial.
-En este hotel Pepe Roselló proyectó el polémico hotel Space. ¿Habrá oferta de ocio?
-No. No es la idea porque no es nuestro estilo, ni lo hemos hecho, ni lo sabemos hacer, ni lo queremos hacer. Será un hotel para gente más joven que el Aguas de Ibiza y con la mejor oferta de restauración que podamos. Seguiremos nuestra línea.
-¿Cuál es la historia del proyecto?
-Compramos el Hotel Racó des Sol en 2015. Mi padre tuvo la visión de aprovechar la oportunidad que suponía que hubiera dos solares contiguos disponibles y los compramos también. Hemos reformado el Racó des Sol y estamos ampliándolo. Fue una oportunidad. Todo cuesta mucho dinero y mucho esfuerzo y más para nosotros que somos un grupo pequeño. No salen las cosas de un día para otro. Creíamos que podíamos hacer algo divertido y, como se suele decir, nos hemos liado la manta a la cabeza para hacer un producto divertido de calidad. La idea era empezar en 2019, pero con la pandemia lo paralizamos. En octubre empezamos las obras de reforma y ampliación. Esperamos abrir este verano completamente reformado y ampliado, aunque todavía no lo estamos comercializando. Será un softopening.
-¿Sant Antoni está de moda con tanta reforma y tanto incremento de categoría?
– Había mucha oferta desposicionada porque Sant Antoni fue pionero en el turismo. Es el camino.
-¿Se han planteado entrar en el mundo de la restauración después del éxito del Maymanta, el restaurante peruano ubicado en la azotea del Aguas de Ibiza?
-Sí, pero nos faltan tiempo y manos para todo y estamos centrados en nuestras inversiones. No somos pequeños, pero tampoco grandes y tenemos muchos proyectos en marcha.
-¿Y crear una marca de la cadena?
-Tenemos la marca NCalma Hotels, pero es más de uso interno. Pensamos que cada hotel ha de tener su personalidad.
