El aeropuerto de Ibiza ha reanudado sus operaciones normales después de haber estado cerrado al tráfico aéreo durante más de una hora debido a un incidente de seguridad.
El cierre temporal se produjo a raíz de un incidente grave en una aeronave de la compañía Ryanair con destino a Milán Bérgamo.
La aeronave, que ya se encontraba en la cabecera de pista, fue detenida tras la recepción de la amenaza. La Guardia Civil se desplazó rápidamente al lugar para gestionar la situación y garantizar la seguridad de los pasajeros y la tripulación.
Durante el cierre, todos los vuelos fueron desviados a aeropuertos alternativos, minimizando el impacto en el tráfico aéreo.
Tras haber descartado cualquier peligro, el aeropuerto ha vuelto a su actividad normal, aunque con algunas demoras en 15 vuelos, que se van a ir normalizando con el correr de la tarde.
El informe de la Guardia Civil
La Guardia Civil informó que el problema dentro del avión de Ryanair ocurrió debido a que un pasajero, en aparente estado de ebriedad, manifestó que llevaba una bomba, lo que ocasionó el regreso de la nave a Ibiza.
Inmediatamente, se activó el protocolo pertinente, en el que actuó la Guardia Civil mediante el grupo Gedex, realizando la inspección y lograron verificar que lo que había dicho el pasajero era mentira.
El pasajero fue detenido por las autoridades y tras esto el aeropuerto funcionó con normalidad.
