La presión migratoria sobre las Pitiusas ha alcanzado un nuevo nivel de alerta este año, con un notable incremento en la llegada de pateras a las costas de Formentera.
Hasta agosto, se han contabilizado 94 embarcaciones y un total de 1.430 personas, de las cuales 83 pateras han llegado únicamente a Formentera. Esta situación ha provocado la saturación de los servicios de primera acogida y los recursos disponibles en la isla, según ha afirmado el presidente del Consell Insular, Llorenç Córdoba.
Córdoba ha expresado su preocupación en una reciente entrevista, donde subrayó que la isla «no está preparada» para hacer frente a la masiva llegada de personas migrantes. «Está llegando demasiada gente, y nuestros servicios están completamente desbordados, especialmente en lo que respecta a los menores no acompañados, quienes pasan a estar bajo la tutela del Consell», comentó el presidente insular.
Ante la gravedad de la situación, Córdoba ha valorado positivamente la propuesta de la Confederación Española de Policía (CEP) de crear un Centro de Atención Temporal de Extranjeros (CATE) en Ibiza. «Es una medida necesaria para poder gestionar de manera más eficiente la llegada constante de personas y aliviar la presión sobre Formentera», afirmó.
El presidente también destacó la necesidad urgente de abrir nuevos centros para menores migrantes no acompañados, ya que los actuales están saturados. «Desde Formentera, estamos trabajando en la apertura de nuestro propio centro, pero es un proyecto complicado y requiere tiempo», explicó Córdoba.
Medida del Govern
Para abordar esta emergencia migratoria, el Govern balear ha anunciado la convocatoria de una conferencia extraordinaria de presidentes insulares, prevista para la primera semana de septiembre. El objetivo es discutir y coordinar una respuesta conjunta ante la llegada masiva de pateras al archipiélago.
Números
El cambio en el punto de llegada de las pateras ha sido otro factor determinante en esta crisis. Según la directora de Salud, Socorro y Medio Ambiente de Cruz Roja, Victòria Avellà, este año las Pitiusas han recibido un 58% de las pateras que han llegado a Baleares, un aumento significativo en comparación con años anteriores. Avellà destacó que «nunca habíamos tenido tanta llegada en Ibiza», lo que ha incrementado la presión sobre los servicios locales.
Con 2.435 migrantes llegados a Baleares en lo que va de año, la cifra ya ha superado la de 2022, que había sido el año con más llegadas hasta ahora. A pesar de ello, las autoridades insisten en que es necesario esperar a los últimos meses del año, que suelen registrar un mayor número de llegadas, para evaluar el impacto total de este fenómeno en 2024.
Llorenç Córdoba concluyó haciendo un llamado a la acción, subrayando que es imperativo reforzar los recursos y coordinar esfuerzos para garantizar una gestión adecuada de esta situación que, de no ser controlada, podría llevar a una crisis humanitaria en las islas Pitiusas.
