El tiempo corre y el 22 de febrero marca un punto de inflexión para el sector del transporte en Baleares. Ese día, si no hay cambios de última hora, expirará la moratoria que ha frenado la concesión de nuevas licencias de taxis y VTCs, abriendo la puerta a un aluvión de solicitudes. El Govern balear, que aún no ha respondido si prevé prorrogar la medida o si conseguirá aprobar a tiempo un nuevo reglamento, mantiene la incertidumbre al sector.
La Ley 1/2024, aprobada el 16 de febrero del año pasado, modificó la Ley 4/2014, de 20 de junio, de transportes terrestres y movilidad sostenible de las Islas Baleares. El Govern señaló entonces que se suspendía “la concesión y la tramitación de los procedimientos pendientes de resolución de autorizaciones ordinarias de arrendamientos de vehículos con conductor y de licencias de autotaxi”, hasta tanto se establecieran nuevos criterios, que respondieran “a la mejora de la calidad del aire, la gestión del transporte, del tráfico y del espacio público”.
Para esto, el Ejecutivo autonómico lanzó el último agosto un estudio integral que sirviera de diagnóstico y marcara el rumbo de la reglamentación. La metodología del mismo, tal como ha ido publicando La Voz de Ibiza, ha suscitado numerosas críticas por su escasa fiabilidad.
Una carrera contrarreloj imposible
La suspensión de licencias para taxis y VTCs termina el 22 de febrero y a esta altura resulta difícil creer que el reglamento necesario para nuevas licencias esté listo.
Esto se deduce, al menos, de las respuestas dadas por el Govern en el Parlament el último 4 de febrero. Ante la consulta del diputado socialista Marco Antonio Guerrero y Moreno sobre si pensaban llegar a tiempo con el reglamento, el Govern se limitó a contestar que se había abierto el período de exposición pública (tal como informó La Voz de Ibiza, se extenderá hasta el 14 de febrero). El Ejecutivo autonómico también ha recordado que antes de que el reglamento esté listo se necesita pasar por un período de audiencia e información pública, luego se deben solicitar y emitir informes y luego elaborar la Memoria de Impacto Normativo.
Un proceso que hace inviable llegar con los tiempos.
Avalancha de solicitudes
«El reglamento no estará aprobado antes del 22 de febrero, por lo cual deberán prorrogar la moratoria. Si eso no ocurre, veremos una avalancha de solicitudes de licencias», señala a La Voz de Ibiza Joan Marí Riera, de la Agrupación de Autotaxis de las Islas Baleares.
El gran beneficiado sería el gigante Uber, operando en Ibiza y Mallorca, ya que los proveedores que aportan vehículos y conductores podrían acceder a nuevos títulos habilitantes sin coste y evitar así la especulación que hay en el mercado.
El taxista recuerda que, cuando la moratoria se aprobó, había unas 10.000 solicitudes en trámite en Baleares. Con la restricción en vigor, apenas se han solicitado 16, pero “porque todos sabían que serían rechazadas”.
Licencias municipales
La segunda consecuencia es que los ayuntamientos podrían continuar con la tramitación de la concesión de nuevas licencias fijas para el taxi y que la moratoria paralizó.
El problema, según los taxistas, es que el Govern no ha actuado con la rapidez necesaria. Marí Riera critica que el proceso de exposición pública no se haya abierto antes, cuando desde hace un año se sabía que este momento llegaría. De hecho, cree que se debió hacer antes de comenzar el estudio integral, al principio mismo de la moratoria. Ahora, con las alegaciones cerrándose el 14 de febrero, no hay margen.
Por su parte, el presidente de la Federación Independiente de Taxis de las Islas Baleares (FITIE), Toni Roig, asegura a La Voz de Ibiza que el sector desconoce si hay un borrador avanzado del nuevo reglamento. «Sabemos que se trabaja en ello, que se ha avanzado en muchas partes, pero no tenemos constancia de que haya un documento cerrado».
Roig alerta sobre los peligros de que el 22 de febrero llegue sin medidas de contención: «Hemos vivido otros procesos con vacíos legales en los que se colaron miles de solicitudes de VTCs». Un escenario que, de repetirse, podría tener un impacto directo en la movilidad en Ibiza y en otras islas del archipiélago.
“Veremos qué capacidad de maniobra hay para nuevas licencias”, añade Roig. Pero apunta a que el margen no es muy grande: “Quiero recordar que hay un 50 % o más del año en el cual la flota de autotaxis de Ibiza tiene un porcentaje del 20 o 30 % de vehículos en cuadrantes de vías libres, porque la demanda no es tan alta”, en relación a la temporada baja.
Silencio desde el Govern: la clave de la prórroga sigue en el aire
Desde el Govern, hasta el momento, no han respondido a las consultas de La Voz de Ibiza sobre si extenderán la moratoria o si llegarán a tiempo con la normativa.
En la señalada sesión del Parlament del 4 de febrero, el Govern se ha limitado a responder que el otorgamiento de nuevas licencias se basará en el nuevo reglamento, sin dar mayores precisiones. Y que, en el caso de las licencias estacionales, estarán a cargo de cada Ayuntamiento.
“Para que la gente estuviese tranquila deberían decir que se prorroga seis meses. Lo que no deberían es tener esta pasividad, es decir, no hacer nada”, se queja Marí Riera.
La única certeza es que, en caso de levantarse la moratoria sin una normativa firme, se habilitaría un escenario que muchos en el sector consideran descontrolado: una avalancha de peticiones que podría alterar el frágil equilibrio entre taxis y VTC en Ibiza y el resto de Baleares.