Ibiza busca el respaldo de Europa para hacer frente al aumento de llegadas de migrantes al archipiélago. El presidente del Consell Insular de Ibiza, Vicent Marí, ha advertido en Bruselas que “la presión migratoria que sufren Baleares no puede recaer solo en los consejos insulares” y ha pedido que la Unión Europea despliegue Frontex para apoyar el control y la gestión de la crisis migratoria en las islas.
Durante una reunión mantenida con el comisario europeo de Interior y Migración, Magnus Brunner, Marí participó junto a la presidenta del Govern balear, Marga Prohens, y los presidentes de los otros tres consells insulares. El encuentro se enmarca en el acuerdo alcanzado durante la Conferencia de Presidentes Insulares celebrada en Ibiza en mayo, cuando las instituciones acordaron llevar a Bruselas la falta de respuesta del Gobierno central ante el repunte migratorio.
El presidente ibicenco trasladó la situación de “colapso” que viven los servicios sociales insulares, especialmente el sistema de tutela de menores extranjeros no acompañados, que actualmente atiende a más de un centenar de jóvenes con apenas cuarenta plazas disponibles. “No hablamos de una cuestión económica, sino de capacidad: no hay espacios ni personal suficiente, y cada nueva llegada nos sitúa al límite”, advirtió.
Ibiza pide una «implicación directa» de Europa
Marí insistió en que “Ibiza no puede gestionar sola un fenómeno que es europeo”, y subrayó que las islas mediterráneas “son la puerta de entrada a Europa”, pero “esta puerta no puede estar abierta sin control ni corresponsabilidad”.
En este sentido, reclamó una implicación directa tanto de Bruselas como del Gobierno de España, al que pidió que asuma sus competencias en materia de control fronterizo, repatriación y tutela de menores.
“Europa escucha y entiende que esto no puede recaer en una administración local. Ahora es el momento de que también lo entienda el Estado”, afirmó Marí.
Según explicó el Consell, el comisario Brunner se comprometió a estudiar medidas específicas para los territorios insulares, una decisión valorada positivamente por la delegación balear. “Hoy damos un paso importante: Europa escucha Ibiza. Ahora necesitamos hechos”, concluyó el presidente insular, destacando que “el futuro del Mediterráneo se juega en la capacidad de proteger nuestras fronteras y también a las personas y territorios que las sostienen”.













