Sa Unió de Formentera, coalición formada por Partido Popular y Compromís, maniobró al principio de la presente legislatura para nombrar al ex presidente del PP y presidente de la Asociación Hotelera de Formentera, Juan Manuel Costa Escanellas Paya, como representante del Consell de Formentera en el Consejo de Administración de Autoridad Portuaria de Baleares, a pesar de tener intereses portuarios directos e indirectos en el puerto de la Savina.
No en vano, Costa Escanellas Paya se había presentado al concurso que resolvió la Autorización de Ocupación Temporal (AOT) de la Dársena de Levante que finalmente cayó del lado de Puertos y Litorales Sostenibles y que la explota bajo el nombre comercial de Port Formentera. Se trata de la misma empresa que gestiona la gasolinera y la marina seca en La Savina y las antiguas instalaciones del Club Náutico de Ibiza bajo el nombre de Port Nàutic Ibiza.
Costa Escanellas se presentó al concurso para la explotación de los amarres que a final de temporada formarán parte de la concesión unificada de la Savina, a pesar de la oposición de Sa Unió, GxF y PSOE, con la sociedad Formentera Future Investments, SL.
Córdoba frena el nombramiento de Costa Escanellas
El entonces presidente de la institución, Llorenç Córdoba, abortó la operación diseñada por el entonces presidente del PP, José Manuel Alcaraz. Fue el propio Córdoba quien ocupó durante los primeros meses de la legislatura el cargo remunerado de miembro del Consejo de Administración de la APB, tal como había venido siendo la norma en la institución.
De hecho, no se conocen casos de que un consell nombre a un empresario como su representante en el Consejo de Administración de la APB, tal como pretendía Alcaraz.
En plena crisis, Sa Unió destituyó a Córdoba del cargo por el único conseller que se mantuvo en el gobierno insular, el titular de la cartera de Turismo, Artal Mayans.
Los vínculos de Sa Unió con la Savina
El nombramiento frustrado de Costa Escanellas no es la única vinculación que mantiene Sa Unió con el puerto de la Savina. No en vano, el presidente de Compromís y vicepresidente del Consell, Javier Serra, es socio de Ángel Bustos en Marina de Formentera, SA, antiguo concesionario que se sentará en el juzgado por no desalojar las instalaciones y que mantiene la concesión de un edificio de oficinas.
A pesar de que no renunció a su participación y habría incumplido la Ley de Incompatibilidades durante casi un año, Serra fue el responsable político de dejar caducar la tramitación medio ambiental del Plan Especial del Puerto de la Savina sin que a día de hoy haya dado una sola explicación de los motivos que hay detrás de esta operación. Toco ello, con el beneplácito de la oposición, ya que nadie hasta le ha reclamado responsabilidades políticas, tanto que este asunto fue ignorado sorprendentemente del informe de la Comisión Ética que formó parte de la operación diseñada para derrocar a Córdoba.
Nuevos nombramientos
A pesar de que el nombre de Juan Manuel Costa está detrás de la controvertida licencia de legalización y reforma del restaurante El Caminito, Sa Unió le había propuesto como uno de los 160 representantes de la institución insular propuestos por Sa Unió a órganos colegiados. Los nombramientos fueran tumbados por la oposición tras las críticas de Llorenç Córdoba en el Pleno.
Costas Escanellas era la propuesta de Sa Unió para representar al Consell de Formentera en el Consell Social de la UIB y en el Consell Econòmic i Social de Baleares.
La sombra de Alcaraz
El voto en contra de los nombramientos llegó, sin embargo, por la presencia de José Manuel Alcaraz como suplente de Costas Escanellas en el órgano de la Universidad de las Islas Baleares.
El cargo carece de relevancia política. Sin embargo, su nombramiento tiene un carácter simbólico de apoyo político de Sa Unió a su figura. Es por este motivo que la oposición evitó refrendar la medida en tanto que la dimisión de Alcaraz fue la condición exigida para apoyar la moción de censura que aupó a Óscar Portas a la presidencia.
Nada dijeron GxF y PSOE sobre Costa Escanellas y al contrario que en el caso de Alcaraz.
Córdoba: «Era incompatible»
Fue en este punto del debate cuando Llorenç Córdoba reveló que José Manuel Alcaraz había propuesto a Costa Escanellas para el cargo remunerado de la APB sin ser «ni político ni técnico», lo que fue un «punto de fricción» desconocido hasta la fecha.
Para Córdoba, Costa Escanellas era «incompatible» para el cargo en tanto que gracias a él habría accedido a información confidencial sobre las bases de los concursos, entre otras, información que podría utilizar en su beneficio o por terceros con los que mantiene intereses en conjunto, como Ángel Bustos.
Los intereses de Juanma Costa
Costa Escanellas ha sido noticia en los últimos meses por dos controvertidos asuntos: la licencia del restaurante Caminito y el hotel promovido por Ángel Bustos en es Pujols.
La licencia al Caminito que expertos han calificado de nula de pleno derecho por múltiples irregularidades y defectos de forma forma parte de la documentación que Córdoba puso en manos de la Fiscalía Anticorrupción.
El empresario hotelero es uno de los promotores del cuestionado proyecto, junto a la familia fundadora del Grupo Pacha, y el hijo del anterior explotador del restaurante, cuyo inmueble es propiedad de la familia de la secretaria general de GxF, Sonia Cardona, tal como desvelara La Voz de Ibiza.
Asimismo, la familia de Costa Escanellas de Hoteles Paya es socia de Ángel Bustos, quien la Fiscalía pide penas de cárcel por okupar la dársena de poniente en el puerto la Savina durante casi cinco meses instalaciones portuarias sin título habilitante, en el hotel Flor de Sal & Spa.